Cómo citar este artículo:
Cortés Borra A, Jaén Ferrer P, Martínez Riera JR. Enfermería se escribe con H: con H de humanización. RIdEC 2025; 18(1):56-61. doi: https://doi.org/10.63178/xfrl3386ridec
Fecha de recepción: 15 de octubre de 2024.
Fecha de aceptación: 26 de abril de 2025.
Autores
Albert Cortés Borra. Enfermero. EAP La Garriga. ICS Atención Primaria. Coordinador grupo de trabajo humanización AEC. Doctorando Ciencias de la Salud Universidad de Alicante, HUGES. España
Pedro Jaén Ferrer. Enfermero. Coach personal. HUGES. España
José Ramón Martínez Riera. Enfermero. Profesor Titular Universidad de Alicante. España
Dirección de contacto:
Resumen
En un momento en que el concepto de humanización ha cobrado gran relevancia en el ámbito de la salud, es fundamental entender que no se trata de una tendencia pasajera, sino de un pilar esencial de los cuidados de enfermería. La humanización se ha convertido en un objetivo estratégico en la atención sanitaria, promoviendo un enfoque más empático y respetuoso hacia la dignidad de cada persona.
Desde que se inició el plan de humanización del INSALUD en 1984, han surgido numerosas iniciativas destinadas a transformar los centros de salud en espacios más cálidos y humanos. Universidades y asociaciones han desarrollado programas y talleres que capacitan a las enfermeras en habilidades que priorizan la conexión personal con los pacientes. Un ejemplo destacado es la creación del Grupo de Trabajo de Humanización de la Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC), que busca fomentar el diálogo y desarrollar estrategias para que la atención comunitaria sea una experiencia más humana y centrada en la persona.
Es de vital importancia mantener valores fundamentales en la práctica enfermera: humildad, empatía y respeto por la identidad única de cada paciente. Los cuidados que se brindan deben ir más allá de lo técnico, construyendo relaciones significativas que reconozcan a las personas como lo que realmente son, seres humanos con emociones, preocupaciones y sueños.
Con un enfoque en la mejora continua, se propone que la humanización no sea solo un ideal, sino una práctica diaria.
Las enfermeras son verdaderos agentes de cambio, y a medida que estos valores se integren en su labor, se reflejará una atención más cálida y cercana, convirtiendo la enfermería en una disciplina que realmente se escribe con H de humanidad.
Al integrar la humanización en nuestra atención, estamos contribuyendo a un cuidado más cercano y personalizado, lo que permite que la enfermería se escriba con H de humanidad.
Palabras clave: humanización; Enfermería; cuidado humanizado.
Abstract
Nursing is written with an H: an H for Humanization
At a time when the concept of humanization has become very relevant in the healthcare setting, it is essential to understand that this is not a temporary trend, but a key cornerstone of nursing care. Humanization has become a strategic objective in healthcare, promoting a more empathetic approach that is also more respectful towards the dignity of each person.
Since the INSALUD humanization plan was initiated in 1984, several initiatives have been developed with the aim to transform health centres in warmer and more humane spaces. Universities and associations have developed programs and workshops to train nurses in skills prioritizing their personal connection with patients. A prominent example is the creation of the Humanization Work Group by the Association of Community Nursing (ACN), intended to encourage dialogue and develop strategies to turn community care into a more humane and person-centred experience.
It is highly important to sustain essential values in nursing practice: humbleness, empathy and respect for the unique identity of each patient. Care offered should go beyond technical matters, and build significant relationships that acknowledge persons as what they really are: human beings with emotions, concerns and dreams.
With an approach focused on continuous improvement, humanization is intended to be not only an ideal, but a daily practice. Nurses are real agents of change; and as these values get incorporated into their work, this will translate into a warmer and closer care, and nursing will become a discipline that is really written with an H for Humanity.
By integrating humanization into our care, we are contributing to a closer and more personalized type of care, allowing Nursing to be written with an H for Humanity.
Key words: humanization; Nursing; humanized care.
Introducción
Humanizar: tr. Hacer a alguien o algo más humano, familiar y afable.
Humanización: f. Adquisición de características más humanas y más amables.
Humanidad: sensibilidad, compasión, bondad hacia los semejantes.
Diccionario de la Real Academia Española. 22a edición
Cuando se habla de humanización en los tiempos actuales, se corre el riesgo de pensar que estamos sumidos en una moda, ya que desde hace unos años en el sector sanitario el término humanización es un término de uso común entre los gestores y profesionales, un término que tiene, y a veces con cierta dosis de razón, fervientes defensores y también grandes detractores. Esta moda de la humanización no debería haber llegado nunca, ya que la humanización debe formar parte de la atención enfermera y por extensión de las organizaciones de salud en las que trabajamos.
Al hablar de humanización en salud es preciso remontarse al plan de humanización del INSALUD de 1984 [1], el cual promovía que los centros sanitarios fueran más humanos y existiera un mayor respeto a la dignidad humana mediante una mejor formación del personal y una adecuada organización de los servicios para una atención de calidad a las personas, informándolas sobre su salud y el afrontamiento ante posibles problemas.
A nivel nacional se empezó a trabajar con estrategias humanizadoras del sistema sanitario, mucho antes del actual boom de la humanización. Siguiendo con la historia de la humanización y salud no se pueden olvidar los trabajos de José Carlos Bermejo [2], el verdadero precursor de la humanización en nuestros tiempos; sin olvidar la experiencia médico-paciente del Dr. Albert Jovell [3], que transmitió que lo importante es el paciente y no la enfermedad, buscando ese trato personal que debe ser el cuidado humanizado.
Se han puesto en marcha muchas estrategias destinadas a mejorar las condiciones de atención a las personas. La Universidad Europea de Madrid se ha sumado con el Máster en Humanización de la Salud dirigido por la Dra. Carmen Ferrer [4], donde se forma a profesionales que sienten y creen en la humanización, o la Cátedra de Humanización de la Asistencia Sanitaria de Universidad Internacional de Valencia [5] que tiene como objetivo principal la promoción de la docencia, la investigación y la divulgación en torno a la humanización de la salud, a la vez que busca establecer los puentes necesarios entre las instituciones académicas, sociales y empresariales para lograr un impacto positivo en la humanización sanitaria en todos sus ámbitos, [6]; en definitiva, acciones grupales, individuales, regladas o no pero todas con un mismo fin, un mejor sistema, más personal, menos frío y con menos barreras entre los profesionales y las personas a las que atiende, que se concrete en una mejor prestación de los cuidados profesionales enfermeros.
Y en atención comunitaria la Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC), que siempre ha defendido el rol humanizador de las enfermeras comunitarias, desde abril de 2023, ha puesto en marcha el Grupo de Trabajo de Humanización H-AEC [6] con los siguientes objetivos:
• Debatir e implementar iniciativas que humanicen la atención enfermera en el ámbito comunitario.
• Formar a las enfermeras en habilidades personales y de grupo donde la humanización sea el centro de esa formación.
• Crear un espacio de debate en la web de la AEC y las redes sociales con el fin de humanizar la enfermería comunitaria.
• Ser interlocutores con la junta directiva de la AEC para poner en marcha acciones de mejora de la propia asociación y otras sociedades científicas de Enfermería.
Apostar por la humanización es apostar por las personas. Hay múltiples publicaciones al respecto que exponen de manera muy clara acciones que se han llevado a cabo ante la posible despersonalización de la atención a la persona, familia y comunidad, siendo estos los puntos clave donde todos los que creen en una sanidad más humanizada coinciden [7, 8].
Para humanizar la atención enfermera se han de tener en cuenta los valores. Valores inquebrantables como profesionales que buscan lo mejor para las personas. Valores que han de estar presentes siempre en la atención personalizada que se presta en cualquier momento de su ciclo vital tanto en la salud como en la enfermedad. Haciéndolo además con empatía, que es saber estar y ponernos en el lugar del otro, cuando acuden a nosotros para confiar sus miedos, dudas, ansiedades...
y poder así encontrar respuestas que les permitan afrontar sus problemas y necesidades. Aquí es donde se ha de demostrar que somos profesionales con H-Alma como dice Joan Carles March [9].
Se ha de impregnar el día a día profesional con unos valores estratégicos con H, a partir del modelo HUGES [10], son valores con H, valores que no hablan únicamente de humanización, haciendo más grande el significado de la letra H.
• Humildad.
• Honestidad.
• Honradez.
• Habilidades.
• Hacer: predicar con el ejemplo.
• Humor.
• (H)empatía.
• (É)tica.
• Hablar y escuchar.
• (No) hermetismo: transparencia.
¿Somos capaces de llevar a la práctica todos estos valores?
¿Estamos dispuestos a cambiar?
¿Es tan difícil este cambio de paradigma?
Como principio se debe empezar por tres de ellos y paulatinamente ir incorporando el resto hasta completarlos, es cuestión de cambio de mentalidad y adaptar la forma de trabajar al trato a personas y familias con H.
Pero hay evidentes limitadores de la humanización, entre los que se destacan:
• Tecnificación.
• Falta de control de la demanda.
• Desigualdades.
• Burocracia.
• Desconocimiento.
• Financiación.
• Paternalismo.
• Ausencia de planificación y priorización.
•...
Y dónde se debe incidir para lograr la humanización:
• Información.
• Comunicación.
• Planificación.
• Adecuación de recursos.
• Visión de futuro.
• Participación de las personas en la toma de decisiones.
• Respeto.
Hay que procurar una atención individualizada, y por ello evitar trabajar mecánicamente, no hay que olvidad nunca que la persona merece un trato digno y respetuoso, dejando de lado posturas paternalistas que no conducen a su autonomía y limitan su autocuidado. Es importante destacar que ética, estética y humanización tienen que ir de la mano. Una atención con desigualdades o prejuicios no es una atención humanizada, por ello se ha de demostrar que la humanización debe ser parte de la atención a la persona, iniciándola en cualquier momento en que se lleve a cabo el contacto con las personas, sea en el centro de salud, en el trabajo, la escuela, la comunidad..., porque el primer contacto es fundamental, y queda en el subconsciente de las personas.
En muchas ocasiones se dice que hay que tratar a las personas como nos gustaría que nos tratasen a nosotros, y aquí viene a colación la frase con la que encabeza su perfil de Twitter el Dr. José Carlos Igeño “Para mí, todos los pacientes son mi madre” [11].
La humanización es conocer y respetar la dignidad de uno mismo para poder entender las necesidades y limitaciones de los demás. Conocer sus ideas y sus fines para poder proporcionarle los medios necesarios para conseguirlos, y por supuesto respetar la identidad de las personas refiriéndonos a ellas por su nombre y no por su patología como se suele hacer cuando se dice diabéticos, hipertensos, obesos... cosificando a las personas por su enfermedad. Humanización debe ser sinónimo de calidad, y junto con la ética y la estética son factores que van a permitir que la humanización sea real y efectiva.
Las enfermeras son referentes clave del sistema sanitario, una línea de actuación directa y personal, aquí es donde radica la grandeza de la enfermería, en la que la longitudinalidad es, sin lugar a dudas, humanización.
La humanización de la salud es una realidad, nos guste o no estamos sumidos en esta corriente, y para ello se busca la mejora continua de los cuidados. Las enfermeras no son ajenas a ello. Se han de sumar esfuerzos entre todos los actores participantes en el sistema: desde los directivos y gestores de alto nivel, pasando por los mandos intermedios y, por supuesto, los profesionales que son los verdaderos artífices de la humanización efectiva, así como las personas, las familias y la comunidad que deben participar activamente en todo el proceso de atención. Prueba de ello es el compromiso de las instituciones gubernamentales de intenciones de crear planes de humanización de la sanidad a nivel de comunidades autónomas [12-14], lo que es una primera piedra en la tan ansiada humanización, pero estos grandes planes no deben quedar solo en eso, en grandes proyectos sobre papel, sino deben implementarse con la participación de todos: gestores, profesionales y asociaciones de pacientes y sociedades científicas, para ofrecer unos cuidados que aúnen ciencia, humanización y técnica para promocionar y reforzar la salud; pero que lamentablemente han estado y siguen estando desvalorizados, cuando no invisibilizados, por parte de las instituciones y de la propia sociedad, lo que ha quedado en evidencia durante esta pandemia [15]. Porque la humanización debe ser, y por descontado lo es, una estrategia global, una estrategia vinculada con la calidad de la atención y la ética del cuidado, es por todo ello que se han de sumar esfuerzos, acciones institucionales que aboguen por cambios de actuación en grandes líneas de decisión, pero facilitando a las enfermeras que puedan trabajar de manera acorde a los planes y procedimientos establecidos, porque un profesional cuidado y motivado va a ser el primer eslabón de la verdadera cadena de humanización, basada en el profesionalentrismo [16]. Tampoco hay que olvidar que pequeños detalles dependen única y exclusivamente de los profesionales asistenciales: saludar, mirar a los ojos, utilizar la empatía hacia el paciente, mantener el respeto y cordialidad necesarios, etc. En definitiva, al tratar a las personas como lo que son PERSONAS en mayúscula, ya se habrá dado un paso, y bien grande, en mejorar nuestro sistema sanitario, ya de por sí excelente, pero que aún puede ser mejor si la profesión enfermera se escribe con H.
Conflicto de intereses
Ninguno.
Financiación
Ninguna.
Bibliografía
[1] Ministerio de Sanidad. Plan de Humanización de la Asistencia Hospitalaria [internet]. Madrid: Ministerio de Sanidad y Consumo. Instituto Nacional de la Salud. Subdirección General de Atención Hospitalaria. Madrid; 1984. [citado 28 abr 2025]. Disponible en: http://www.ingesa.msssi.gob. es/estadEstudios/documPublica/internet/pdf/Plan_Humanizacion_AsistHospit.pdf
[2] Bermejo Higuera JC, Villacieros Durbán M. El compromiso de la humanización en las instituciones sociosanitarias. Josecarlosbermejo [internet] 2013 [citado 28 abr 2025]. Disponible en: http://josecarlosbermejo.es
[3] Jovell A. Cáncer. Biografía de una supervivencia. Editorial. [internet]. Barcelona: Planeta; 2008.
[4] Universidad Europea de Madrid. Máster de humanización en salud. Universidad Europea de Madrid [internet] [citado 28 abr 2025]. Disponible en: https://online.universidadeuropea.com/master-humanizacion-salud-online.html
[5] Universidad Internacional de Valencia. Cátedra de humanización de la asistencia sanitaria. VIU [internet] [citado 28 abr 2025]. Disponible en: https://portaldeinvestigacionviu.com/es/main/seeCatedraInfo/1
[6] Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC). H-AEC Grupo de trabajo de humanización. AEC [internet] [citado 28 abr 2025]. Disponible en: https://www.enfermeriacomunitaria.org/web/index.php/menu-principal-item-asociacion/grupos-de-trabajo/humanizacion-aec-h-aec/objetivos
[7] Gutiérrez Fernández R. La humanización de (en) la Atención Primaria. Rev Clín Med Fam 2017; 10(1):29-38.
[8] Simó J. La (des)humanización (in)visible y la autoevaluación en humanización. Salud, dinero y atención primaria [internet] 2018 [citado 28 abr 2025]. Disponible en: http://saludineroap.blogspot.com/2018/10/la-deshumanizacion-invisible-y-la.html
[9] March JC. Liderar con corazón. Escuela Andaluza de Salud Pública. 2014.
[10] Cortés A. Humanización de la gestión sanitaria. Slideshare [internet] [citado 28 abr 2025]. Disponible en: https://es.slideshare.net/scgs/humanizacin-y-gestin
[11] Igeño JC. Perfil de Twitter. X [internet] [citado 28 abr 2025]. Disponible en: https://twitter.com/Jcarlosigeno
[12] Andalucía Información. La Junta apuesta por “humanizar” la atención primaria sanitaria. Andalucía Información [internet] 2019 [citado 28 abr 2025]. Disponible en: https://andaluciainformacion.es/andalucia/811215/la-junta-apuesta-por-humanizar-la-atencion-primaria-sani-taria/
[13] Recomendaciones de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía núm. 32 Humanización https://www.sspa.juntadeandalucia.es/agencia-decalidadsanitaria/blog/recomendaciones/recomendacion-no-32-humanizacion/
[14] Dirección General de Humanización y Atención al Paciente. II Plan de Humanización de la Asistencia Sanitaria 2022-2025 [internet]. Madrid: Dirección General de Humanización y Atención al Paciente; 2022. [citado 28 abr 2025]. Disponible en: https://www.madrid.org/bvirtual/BVCM050581.pdf
[15] Elsevier. Los cuidados están desvalorizados e invisibilizados por las instituciones y la propia sociedad. Elsevier [internet]. [citado 28 abr 2025]. Disponible en: https://www.elsevier.com/es-es/connect/enfermeria/edu-jose-ramon-martinez-riera-de-la-pandemia-se-habla-de-una-ma-nera-muy-medicalizada
[16] Jaén P, Cortés A. Profesionalcentrismo: el nuevo paradigma de la gestión humanizada. RIdEC 2023; 16(1):71-2
Adjunto: