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Originales - 2 - Impacto de la pandemia COVID-19 y del nivel socioeconómico en la lactancia materna

 
Cómo citar este artículo:
Guilló Arakistain A, García Valverde R, Ibarrondo Olagüenaga O, Mar Medina J. Impacto de la pandemia COVID-19 y del nivel socioeconómico en la lactancia materna. RIdEC 2024; 17(2):17-26.
 
Fecha de recepción: 25 de abril de 2024.
Fecha de aceptación: 3 de noviembre de 2024.
 

Autores

 
1 Ane Guilló Arakistain
1 Rebeca García Valverde
2 Oliver Ibarrondo Olagüenaga
2 Javier Mar Medina
 
  1. Enfermera. Osakidetza-Servicio Vasco de Salud. OSI Debagoiena. Matronas de Atención Primaria. País Vasco (España).
  2. Ph.D. Osakidetza-Servicio Vasco de Salud. OSI Debagoiena. Unidad de investigación AP-OSIs. Instituto de Investigación Biodonostia. País Vasco (España).
 
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Resumen 

Introducción: el apoyo grupal es un elemento clave en promover la lactancia materna. La ausencia de apoyo producida por el confinamiento asociado a la COVID-19 pudo reducir la prevalencia de lactancia materna. El objetivo de este trabajo fue estudiar el efecto de la pandemia en las tasas de lactancia materna ajustadas por nivel socioeconómico.
Método: estudio de cohortes observacional retrospectivo en el que se comparó el tipo de alimentación a los 7 días, 2 meses,
4 meses y 6 meses de vida de 389 bebés. Se dividió la muestra en dos grupos según la fecha de nacimiento en prepandemia (215 bebés) y pandemia (174 bebés). Se recogieron variables sociodemográficas, variables de efectividad como el tipo de lactancia a 1 semana, 2 meses, 4 meses y 6 meses, variables clínicas relacionadas con el parto y el nivel socioeconómico. Se utilizaron modelos de regresión logística de efectos mixtos.
Resultados: los bebés nacidos durante la pandemia presentaron tasas de lactancia materna más altas que antes de la pandemia. Las tasas de lactancia materna son más altas que la media europea. Resulta llamativa la asociación estadísticamente significativa de una mayor probabilidad de lactancia materna con el periodo pandemia y el nivel socioeconómico bajo y medio.
Conclusiones: el efecto protector de la pandemia podría estar relacionado con que las madres pasaron mayor tiempo con sus bebés. La incorporación al trabajo es el principal determinante del abandono de la lactancia materna. La política de alargar la baja maternal permitiría promover una mayor duración de la lactancia materna.
Palabras clave: lactancia materna; atención postnatal; clase social; pandemias; infecciones por coronavirus.
 

Abstract 

Impact of the COVID-19 pandemic and socioeconomic status on breastfeeding 
 
Objective: group support is a key element in breastfeeding promotion. The lack of support caused by the lock down associated with COVID-19 may have reduced the prevalence of breastfeeding. The objective of this work was to study the effect of the pandemic on socioeconomic status-adjusted breastfeeding rates.
Method: retrospective observational cohort study in which the type of feeding of 389 babies was compared at 7 days, 2 months, 4 months and 6 months of life. The sample was divided into two groups according to the date of delivery: pre-pandemic (215 babies) and pandemic (174 babies). Sociodemographic variables, effectiveness variables such as the type of lactation at 1 week, 2 months, 4 months and 6 months, clinical variables related to childbirth and socioeconomic level were collected. Mixed-effects logistic regression models were used.
Results: new-born during the pandemic had higher breastfeeding rates than before the pandemic. Breastfeeding rates are higher than the European average. We found statistically significant association of a greater probability of breastfeeding with the pandemic period and low and middle socio-economic status is striking.
Conclusions: the protective effect of the pandemic could be related to mothers spending more time with their babies. Work entry is the main determinant of breastfeeding cessation. The policy of extending maternity leave would promote longer breastfeeding duration.
Key words: breastfeeding; postnatal care; social class; pandemics; coronavirus infections.
 

Introducción 

La lactancia materna presenta beneficios para los lactantes, las madres, sus familias y la sociedad en general (1-3). La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los lactantes sean alimentados exclusivamente con leche materna hasta los seis meses de edad y que la lactancia materna continúe como parte importante de la dieta del lactante hasta que tenga por lo menos 2 años de edad (3). Sin embargo, en los países desarrollados solamente uno de cada tres niños recibe lactancia materna exclusiva durante los seis primeros meses de su vida (4).
Las estrategias que han demostrado su eficacia para mejorar la prevalencia de lactancia materna se basan principalmente en el apoyo presencial, continuo y frecuente (3,5,6). Diferentes estudios sugieren que los grupos de apoyo tienen un mayor efecto que el asesoramiento individual (6-8), mejorando los porcentajes de iniciación, duración y exclusividad de la lactancia materna. La pandemia de COVID-19 ha creado desafíos imprevistos tanto para la asistencia médica a escala mundial, como para las madres que intentaban acceder a recursos de apoyo a la lactancia (9-11). Debido a las políticas relacionadas con la pandemia de COVID-19 y la recomendación de evitar reuniones de personas, las redes de apoyo social de las madres se han visto muy limitadas: no solo han tenido que suspenderse los grupos de apoyo y talleres de lactancia, sino que las madres tampoco han podido reunirse con otras mujeres amigas o familiares que podrían ofrecerles apoyo informal (12).
Antes de la pandemia de COVID-19 todos los centros de salud de la Organización Sanitaria Integrada (OSI) Debagoiena contaban con un taller de lactancia semanal liderado por la matrona de cada centro de salud. La continuidad de la figura profesional de la matrona como dinamizadora del taller aseguraba que la información se adecuara a la evidencia científica y promovía la continuidad de la participación de las asistentes (13). Sin embargo, a partir de mediados de marzo de 2020, estos talleres se suspendieron y un mes y medio más tarde se pusieron en marcha talleres online a través de la herramienta Zoom que duraron hasta septiembre de 2021. La participación en estos talleres online fue considerablemente menor a la participación en los talleres presenciales. Durante todo ese tiempo, las diadas lactantes tuvieron acceso a consultas presenciales individuales con su matrona.
En la literatura se indica la existencia de desigualdades en el mantenimiento de la lactancia según el nivel socioeconómico.
En un estudio sueco, diversos indicadores asociados al nivel socioeconómico (NSE) mostraron que este tiene un impacto en la duración de la lactancia con cifras mayores asociadas al mayor NSE (14). Sin embargo, en general se ha dado más importancia al nivel educativo, como en el estudio de Heck et al. (15), que encontraron una asociación significativa de la educación materna y paterna con la lactancia materna. El análisis de los determinantes sociales de la salud durante la pandemia de COVID-19 ha mostrado desigualdades significativas (16-18). La pandemia COVID-19 ha acrecentado las desigualdades en salud, pero su efecto en la lactancia ha sido distinto según los países (12,19).
Siendo el apoyo grupal un elemento clave en la promoción de la lactancia materna, se requería investigar el efecto en las tasas de lactancia materna de los meses de confinamiento decretados a causa de la pandemia de COVID-19. En este escenario, se planteó el objetivo de estudiar el efecto de pandemia en las tasas de lactancia ajustadas por NSE y testar la hipótesis de que la ausencia de apoyo social redujo la lactancia materna.
 

Método 

Diseño 

Se llevó a cabo un estudio de cohortes observacional retrospectivo en el que se comparó el tipo de alimentación a los 7 días, 2 meses, 4 meses y 6 meses de vida de los lactantes nacidos antes de la pandemia y durante la pandemia.
 

Población y ámbito de estudio 

El grupo a estudio fueron las diadas madre/recién nacido pertenecientes a las Unidades de Atención Primaria (UAP) de Arrasate-Mondragón y de Valle de Leniz de la OSI Debagoiena (Gipuzkoa). Los grupos se definieron según la fecha de parto en prepandemia (1/11/2018–1/11/2019) y pandemia (1/3/2020-1/3/2021). Ambos grupos (prepandemia y pandemia) recibieron el apoyo de la matrona mediante visitas de seguimiento de embarazo, la posibilidad de participar en sesiones prenatales de educación sobre lactancia y visitas de seguimiento de posparto presenciales en consulta. La diferencia entre los dos grupos fue que en el grupo pandemia el taller de lactancia y las sesiones grupales antenatales fueron online y en el grupo prepandemia presenciales. El experimento natural surgió por la dificultad de reunirse presencialmente y de mantener las redes de apoyo a la lactancia, tanto formales en el centro de salud, como informales con amigas y familiares. En este caso, el grupo control fue el grupo de madres que dio a luz y tuvo seguimiento puerperal en condiciones normales, antes de que se declarara la pandemia de COVID-19.
Se incluyeron los nacidos en el Hospital Alto Deba y residentes en Arrasate-Mondragón y Valle de Léniz que cumplieron los siguientes criterios de inclusión: 1) Lactantes sanos, 2) Nacidos entre 01/11/2018-01/11/2019 y entre 01/03/2020-01/03/2021 y 3) Usuarios de las UAP de Arrasate-Mondragón y de Valle de Leniz. Como criterios de exclusión se utilizaron 1) Presencia de enfermedades o condiciones médicas que contraindicasen la lactancia materna, 2) Prematuridad y 3) Gemelaridad.
 

Variables y recogida de datos 

Los datos se recopilaron por parte de las matronas a partir de la historia clínica. Como variables sociodemográficas se recogieron la edad de la madre al parto, el país de nacimiento de la madre, la fecha del parto y el nivel de renta medido por la categoría del copago farmacéutico. Las variables de efectividad fueron el tipo de lactancia a 1 semana, 2 meses, 4 meses y
6 meses en las siguientes categorías: lactancia materna exclusiva, lactancia artificial exclusiva, lactancia mixta. Finalmente, las variables clínicas recogidas fueron terminación del parto (eutócico, instrumental, cesárea), inducción, tipo anestesia, semanas de gestación, episiotomía, sexo del recién nacido, peso al nacimiento y paridad. Como variable indicativa del nivel socioeconómico se utilizó el código de aportación farmacéutica del individuo o de su progenitor o tutor que se basa en el nivel de renta. De esta forma, se definieron tres grupos según el tipo de aportación farmacéutica de la madre: nivel de renta bajo que incluyó a las perceptoras de rentas mínimas de inserción y paradas sin prestaciones de desempleo; nivel de renta medio que incluyó las mujeres con ingreso anual menor de 18.000 € y nivel socioeconómico alto para las mujeres con ingreso anual mayor de 18.000 €.
 

Análisis estadístico 

Se llevó a cabo un análisis descriptivo de las variables categóricas contando el número y el porcentaje en cada categoría.
Las variables se analizaron mediante la media y la desviación estándar. La significación estadística de las diferencias entre los grupos se evaluó mediante pruebas t pareadas para las variables cuando se distribuyan normalmente. Cuando los datos no estén distribuidos normalmente y para los datos ordinales se usará la prueba no-paramétrica de Wilcoxon. El nivel de significación se estableció en p= 0,05. También se realizaron pruebas de chi-Cuadrado, para comparar las tablas de contingencia. Para identificar factores predictores se utilizaron los modelos de regresión logística de efectos mixtos bajo el marco de modelos lineales mixtos generalizados (GLMM), acomodando tanto los efectos aleatorios como los fijos en el modelo (20-22).
 

Consideraciones éticas 

El estudio fue aprobado por el Comité de Ética de Gipuzkoa con el número de referencia GUI-LMC-2021-01, que aprobó el formulario del consentimiento informado. Todas las madres firmaron el consentimiento informado.
 

Resultados 

En la Tabla 1, se muestra el análisis descriptivo de las características de la muestra. Se incluyeron 389 mujeres, de las cuales
215 (55,27%) se reclutaron antes de la pandemia y 174 (44,73%) durante la pandemia. Se trata de grupos comparables entre sí, con diferencias no estadísticamente significativas en todas las variables excepto en el nivel socioeconómico. Las mujeres con nivel alto representaron un 23,72% en el grupo prepandemia frente al 44,25% en el de pandemia.
 
 
En la Tabla 2 y los Gráficos 1 y 2, se muestran el tipo de alimentación desde el nacimiento hasta los seis meses desagregados por periodo (prepandemia y pandemia) y NSE. Comparando el tipo de alimentación, los bebés nacidos durante la pandemia presentan tasas de lactancia más altas que los bebés nacidos antes de la pandemia. Las tasas de iniciación son prácticamente iguales en ambos grupos y a los 4 meses la diferencia se acentúa manteniéndose hasta los 6 meses a favor de los bebés nacidos durante la pandemia. Si se mira la otra cara de la moneda, el aumento del porcentaje de bebés alimentados con leche de fórmula resulta evidente a los 2 y 4 meses y la diferencia es mayor a los 4 meses. En el análisis univariante no aparecen diferencias estadísticamente significativas por NSE.
 
 
 
 
 
 
La Tabla 3 muestra los resultados del análisis de regresión logística. Son fáciles de explicar algunas variables que aparecen como significativas como el tipo de parto, el número de partos previos, las semanas de gestación o el peso del bebé, ya que las categorías con mayor lactancia materna se corresponden con los embarazos y partos sin complicaciones. Resulta llamativa la asociación estadísticamente significativa de una mayor probabilidad de lactancia materna con el periodo pandemia, el sexo hombre y el NSE bajo y medio.
 
 
 

Discusión 

El principal hallazgo de este trabajo es que, contrariamente a la hipótesis inicial, la lactancia materna no se vio afectada negativamente en los centros de salud de la OSI Debagoiena, tal y como sucedió en Australia y Nueva Zelanda (23). Las tasas de lactancia al alta del hospital, por ejemplo, se mantuvieron prácticamente iguales, al contrario de lo que ocurrió en otro estudio realizado en el Norte de Italia (24), donde se halló que las tasas de LME al alta hospitalaria de bebés nacidos durante la pandemia fueron menores que las tasas de bebés nacidos el año anterior (70,39 % vs. 86,39%) (24). Por el contrario, durante la pandemia aumentó de forma estadísticamente significativa el porcentaje de bebés alimentados con lactancia materna exclusiva en Debagoiena. De alguna manera, las madres y los servicios sanitarios pudieron contrarrestar la ausencia de apoyo grupal que se generó por la imposibilidad de realizar talleres de lactancia o reuniones informales con mujeres en su misma situación.
Por otro lado, también resulta llamativa la asociación positiva entre la lactancia materna y el NSE bajo y medio, dato que no coincide con otros estudios (10,25,26), pero que ayuda a reducir la brecha de desigualdad en nutrición y salud entre los recién nacidos en familias con bajo nivel de renta. De hecho, la existencia de un servicio público de salud con acceso a controles prenatales y pediátricos para toda la población contribuye a que las familias con menor nivel de renta reduzcan las desigualdades en salud. Situación que no se cumple, por ejemplo, en el estudio llevado a cabo en Nigeria (25), ya que el nivel socioeconómico bajo se asociaba a menos de cuatro visitas prenatales y a menor prevalencia de lactancia materna. Todas las mujeres de Debagoiena tienen acceso a más de cuatro visitas prenatales en una organización sanitaria pública.
Aunque en el presente estudio no haya datos del nivel de estudios de la madre, este suele aumentar al incrementar el NSE y en estudios previos se ha demostrado la correlación entre el nivel educativo de la madre y el mantenimiento de la lactancia materna (15,27-29). Sin embargo, teniendo en cuenta la realidad socioeconómica de la población estudiada de esta comarca, se podría interpretar que la asociación negativa entre el NSE alto y la lactancia materna exclusiva se debe a que estas madres han dejado de amamantar al tener que reincorporarse a sus trabajos remunerados.
De forma consistente con estos hallazgos, varios autores han descrito la dificultad que supone la reincorporación al trabajo en el mantenimiento de la lactancia materna (27,30,31). En un estudio llevado a cabo entre 2016 y 2017 en Bizkaia (32), más de la cuarta parte de las mujeres que optaron por la lactancia materna manifestaron que darían el pecho hasta la incorporación al trabajo, y un 63,4% refirió dicha incorporación como motivo de abandono entre el cuarto y el sexto mes. En la misma línea, Dagher et al. (27) describen que el riesgo de dejar de amamantar a los 6 meses era mayor para las mujeres que regresaron al trabajo en cualquier momento durante los 6 meses posteriores al parto en comparación con aquellas que no regresaron. Así, Hawkins et al. (30) señalan que la lactancia materna se prolonga cuando las madres disponen de condiciones laborales favorables a la conciliación familiar. Durante la pandemia, algunas madres decidieron retrasar la incorporación laboral para cuidar de su propio bebé y así evitar el contacto con otras personas (cuidadores del bebé, compañeros de trabajo, etc.) para reducir el riesgo de contagio. En otros casos, las empresas dieron la posibilidad a sus empleados de trabajar desde casa (33). Todo esto pudo retrasar la salida materna del hogar familiar y, por tanto, ayudar a mantener la lactancia materna.
Durante la pandemia, muchas mujeres retrasaron su regreso al trabajo remunerado. Por otro lado, las mujeres de bajo y medio NSE que viven en nuestra comarca se dedican a las tareas del hogar. En ambos casos, pasar más tiempo en casa ha demostrado ser beneficioso para el mantenimiento de la lactancia materna. Por lo tanto, la implementación de nuevas políticas de protección a la maternidad aumentaría la tasa de lactancia materna exclusiva al menos hasta los seis meses entre las mujeres trabajadoras. Sería estratégico alargar el actual permiso de maternidad hasta al menos los primeros seis meses del bebé, coincidiendo con el periodo en el que se recomienda la lactancia materna exclusiva (3).
Revista Iberoamericana de Enfermería Comunitaria • Vol. 17 - no 2 diciembre 2024-mayo 2025 A pesar de las dificultades, los resultados muestran que las tasas de lactancia materna a los seis meses en la comarca de estudio están por encima de la media en comparación con otros países europeos. La media española a los seis meses se sitúa en el 46%. Únicamente en Suecia (29) se alcanzaron cifras superiores al 65% obtenido en el presente estudio. En la población estudiada, más tres de cada cinco niños recibieron lactancia materna hasta los 6 meses de vida, por encima del objetivo de la OMS para 2025 (50%) (34). De todas maneras, hay que tener en cuenta que el Hospital Alto Deba es un hospital comarcal donde se atienden partos de bajo riesgo, por lo que quedan excluidas aquellas mujeres con patologías o embarazos de riesgo.
Una limitación del estudio es la falta del dato del nivel educativo de la madre. Aunque exista correlación entre el nivel socioeconómico y el nivel educativo maternal, hay estudios que asocian positivamente la educación con la lactancia materna, pero que refieren que el nivel de ingresos y la ocupación laboral dejan de ser significativos al realizar el ajuste (15).
La categoría del copago farmacéutico, útil por su accesibilidad y objetividad, tiene sus limitaciones porque no considera variables como la educación, la situación laboral o la red social. El código de aportación farmacéutica define como de NSE alto a aquellas mujeres con ingresos anuales mayores de 18.000€. Sin embargo, este valor está por debajo de la ganancia anual media de las mujeres españolas en 2020, que fue de 22.467,48€ según la Encuesta Anual de Estructura Salarial del Instituto Nacional de Estadística (35). Por lo tanto, en el grupo de NSE alto están incluidas mujeres con ingresos menores que la media de las mujeres españolas.
Por otro lado, aunque este estudio se haya centrado en el mantenimiento de la lactancia materna hasta los seis meses, sería interesante poderlo ampliar en el futuro siguiendo la misma cohorte para explorar el tipo de alimentación y sus consecuencias, ya que la recomendación internacional es seguir con la lactancia materna hasta los 2 años o hasta que la madre o el bebé así lo deseen (3,14,36).
Por último, la muestra proviene de una zona geográfica y unas circunstancias muy concretas, de manera que facilita la comparación entre los dos grupos (prepandemia y pandemia). Sin embargo, habría que tenerlo en cuenta a la hora de extrapolar los resultados a otros contextos. En otros estudios elaborados en el Reino Unido, por ejemplo, se menciona que las madres tuvieron dificultades para obtener apoyo a la lactancia durante el confinamiento y que algunas dejaron de amamantar antes de lo que les hubiera gustado (3,5,6). Esa falta de apoyo se concretaba, sobretodo, en la menor ayuda presencial con aspectos prácticos como el agarre, provocando que las madres tuvieran que extraer leche, introducir fórmula o dejar de amamantar (10). Los resultados de dicho estudio destacaron dos experiencias muy diferentes: el 41,8% de las madres sintió que la lactancia materna estaba protegida debido al confinamiento, pero el 27,0% de las madres tuvo dificultades para obtener apoyo y tuvieron numerosas barreras derivadas del confinamiento y algunas dejaron de amamantar antes de lo deseado.
 

Conclusiones 

Las tasas de lactancia materna aumentaron en la población estudiada a pesar de la disminución del apoyo social debido al confinamiento decretado por la pandemia. El efecto protector de la pandemia podría estar relacionado con que las madres pasaron mayor tiempo con sus bebés, ya que la incorporación al trabajo es un importante determinante del abandono de la lactancia materna.
En la población a estudio, las diadas madre-niño de bajo NSE tuvieron cifras similares de lactancia natural a las de nivel alto, por lo que no se encontraron desigualdades por NSE.
Las tasas de lactancia materna en la población a estudio fueron mejores que en otros países europeos. La explicación es que la lactancia materna es la norma y las madres primerizas tienen referencias positivas a su alrededor. Además, todas las mujeres tienen acceso a servicios de salud públicos y de calidad, independientemente de sus ingresos.
Para mantener o mejorar los niveles actuales, además de apoyar a las diadas lactantes en los centros de salud y hospitales, la promoción de la lactancia materna debería estar acompañada de otras medidas de promoción de la natalidad y de conciliación familiar que pasan por el alargamiento de los permisos maternales.
 

Conflicto de intereses 

Ninguno.
 

Financiación 

Ninguna.
 

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Originales - 3 - Intervención comunitaria para mejorar los conocimientos sobre reanimación cardiopulmonar: un estudio cuasiexperimental

 
Cómo citar este artículo:
Baza Bueno M, Veiga Díaz M, Vallejo De la Hoz G, Cuéllar Marcos L, Ballesteros Peña S, Totorika Aranbarri A. Intervención comunitaria para mejorar los conocimientos sobre reanimación cardiopulmonar: un estudio cuasi-experimental. RIdEC 2024; 17(2):27-36.
 
Fecha de recepción: 17 de abril de 2024.
Fecha de aceptación: 3 de noviembre de 2024.
 

Autores

 
1 Mikel Baza Bueno
2 María Veiga Díaz
3 Gorka Vallejo De la Hoz
4 Lucía Cuéllar Marcos
5 Sendoa Ballesteros Peña
6 Araitz Totorika Aranbarri
 
  1. Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Máster en Investigación en Atención Primaria. Unidad de Atención Primaria de Arrigorriaga. OSI Barrualde-Galdakao. Osakidetza. Foro de Salud de Arrigorriaga. España.
  2. Diplomada en Enfermería. Unidad de Atención Primaria de Arrigorriaga. OSI Barrualde-Galdakao. Osakidetza. Foro de Salud de Arrigorriaga. España.
  3. Enfermero. Licenciado en Antropología Social y Cultural. Doctor en Fisiología por la UPV/EHU. Hospital de Galdakao. Servicio de Neumología. OSI Barrualde-Galdakao. Osakidetza. Instituto de Investigación Sanitaria Biobizkaia. Barakaldo. España.
  4. Enfermera especialista en Atención Familiar y Comunitaria. Unidad de Atención Primaria de Arrigorriaga. OSI Barrualde-Galdakao. Osakidetza. Foro de Salud de Arrigorriaga. España.
  5. Enfermero. Máster en Salud Pública. Doctor por la UPV/EHU. Hospital Santa Marina. Osakidetza. Instituto de Investigación Sanitaria Biobizkaia. Barakaldo. España.
  6. Enfermera especialista en pediatría. Centro de Salud La Peña. OSI Bilbao-Basurto. Osakidetza. Foro de Salud de Arrigorriaga. España.
 
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Resumen 

Objetivo: evaluar si las intervenciones locales en formación comunitaria sobre reanimación cardiopulmonar (RCP) y el uso de desfibriladores externos automáticos (DEA) pueden mejorar el grado de conocimiento autopercibido y las actitudes de la población ante paradas cardiorrespiratorias extrahospitalarias (PCR-EH) y RCP en un municipio del País Vasco, promoviendo así una cultura de empoderamiento y responsabilidad compartida.
Material y método: se llevó a cabo un estudio cuasi-experimental sin grupo control, basado en la formación en cascada de agentes referentes de la comunidad, quienes luego formaron a otras personas. Se evaluó la adquisición de conocimientos sobre RCP básica desde abril de 2022 hasta junio de 2023, mediante cuestionarios antes y después de la formación.
Resultados: participaron 27 personas como agentes referentes, impartiendo formación a 116 personas de la comunidad.
El análisis mostró una mejora significativa en la autopercepción y los conocimientos sobre RCP y DEA, con un incremento del 71,2% al 87,3% en el porcentaje de aciertos en los cuestionarios de evaluación posformación. Además, se actualizó el registro de DEA disponibles en el municipio, mejorando la información accesible para la comunidad.
Conclusiones: la iniciativa demostró ser una estrategia efectiva para mejorar los conocimientos y las habilidades sobre RCP y DEA en la comunidad. A pesar de ciertas limitaciones metodológicas, como la ausencia de grupo control, el reducido tamaño muestral y la medición a corto plazo, los resultados sugieren que programas similares podrían ser útiles para mejorar la respuesta ante PCR-EH. Se recomienda la continuidad y repetición periódica de las formaciones para mantener y expandir la red de personas capacitadas en RCP, contribuyendo a la construcción de comunidades cardioprotegidas.
Palabras clave: reanimación cardiopulmonar; desfibriladores; paro cardiaco extrahospitalario; Educación en Salud; redes comunitarias; participación de la comunidad.
 

Abstract 

Community intervention to improve knowledge of cardiopulmonary resuscitation: a quasi-experimental study
 
Objective: ito assess whether local interventions in community training on cardiopulmonary resuscitation (CPR) and the use of automated external defibrillators (AEDs) can improve the degree of self-perceived knowledge and attitudes of the population to out-of-hospital cardiorespiratory arrest (OHCA) and CPR in a municipality in the Basque Country, thus promoting a culture of empowerment and shared responsibility.
Material and method: a quasi-experimental study without a control group was carried out, focused on cascade training of key community agents, who then shared their knowledge with others. The acquisition of knowledge on basic CPR was assessed using questionnaires before and after the training from April 2022 to June 2023, without using a control group.
Results: 27 people participated as key agents, providing training to 116 community members. The analysis showed a significant improvement in self-perception and knowledge of CPR and AED, with an increase from 71.2% to 87.3% in the percentage of correct answers in the post-training evaluation questionnaires. Additionally, the register of AEDs available in the municipality was updated, improving the information accessible to the community.
Conclusions: the initiative proved to be an effective strategy to improve knowledge and skills on CPR and AEDs in the community. Despite certain methodological limitations, such as the absence of a control group, the small sample size, and the short-term measurement, the results suggest that similar programs could be useful in improving the response to OHCA. The continuity and periodic repetition of the trainings are recommended to maintain and expand the network of individuals trained in CPR, contributing to the construction of cardioprotected communities.
Key words: cardiopulmonary resuscitation; defibrillators; out-of-hospital cardiac arrest; health education; community networks; community participation.
 

Introducción 

La parada cardiorrespiratoria extrahospitalaria (PCR-EH) tiene una incidencia anual en Europa entre 67-170/100.000 habitantes, y de ahí que el objetivo del Consejo Europeo de Reanimación sea promover el acceso a una reanimación de alta calidad para todas las personas (1). En el País Vasco se produce una media de 850 paradas PCR-EH, la tercera parte acontecen fuera del domicilio y la reanimación cardiopulmonar (RCP) se inicia antes de la llegada de la ambulancia en el 22,9% de los casos, siendo en un 18,2% el ritmo de presentación desfibrilable (2). A pesar de los esfuerzos estratégicos invertidos en las últimas décadas por parte de los sistemas de emergencias, más del 80% de los pacientes que sufre una PCR-EH muere antes de llegar al hospital (2).
El mejor tratamiento ante una PCR-EH es la aplicación precoz de la cadena de supervivencia (3), que incluye el reconocimiento precoz de la situación de urgencia y la activación del sistema de emergencias, la realización de maniobras básicas de RCP, la desfibrilación precoz y los cuidados médicos especializados (4). La supervivencia tras una PCR-EH aumenta considerablemente con la desfibrilación precoz, siendo la intervención que más influye en el pronóstico (5,6). Sin embargo, la probabilidad de encontrar personas que puedan realizar una RCP básica antes de que llegue el primer recurso sanitario no es muy alta. Según un estudio efectuado en la población general de entre 14-64 años del País Vasco, los trabajadores de los servicios públicos tenían casi cuatro veces más probabilidades de estar formados en el uso de desfibriladores respecto al resto de trabajadores, mientras que las personas con estudios elementales o sin estudios tenían casi tres veces más probabilidades de no estar formados en RCP, en comparación con el resto (7). Esta diferencia en el grado de formación entre la ciudadanía también resulta muy variable según el ámbito geográfico (8). Esto contrasta con la importancia que se le otorga a la adquisición de conocimientos y destreza para el manejo de desfibriladores y realización de RCP, ya que el
94,7% de los encuestados de un estudio consideró “bastante o muy importante” que la población general pudiera aplicar RCP, aunque el 55% se consideró incapaz de identificar un paro cardiaco presenciado (7). De hecho, apenas un 20% de la ciudadanía vasca se considera hábil en la realización de RCP (2) y cerca de un 40% no sabría identificar un desfibrilador externo automático (DEA) de acceso público (9). A pesar de todo, la existencia de DEA de acceso público y que toda la ciudadanía esté legalmente habilitada para su uso ha supuesto una importante apuesta en la mejora de la respuesta ante las PCR-EH en la comunidad (10).
En este artículo se presenta la implementación de un programa de formación comunitaria en RCP y DEA. La iniciativa, impulsada desde la Mesa de Salud de Arrigorriaga, localidad del País Vasco, se centró en capacitar a agentes referentes de la comunidad, quienes posteriormente transmitieron sus conocimientos a otras personas a través de una formación en cascada. Este enfoque de formación en cascada no solo buscaba mejorar los conocimientos y las habilidades en RCP y DEA, sino también fomentar una cultura de empoderamiento y responsabilidad compartida en la atención a las emergencias.
Este estudio proporciona una oportunidad única para explorar el impacto de la formación comunitaria en RCP, un área que hasta ahora no ha sido ampliamente investigada en el contexto de la salud pública. El objetivo de este estudio se centra en evaluar si las intervenciones a nivel local pueden mejorar el grado de conocimiento autopercibido y las actitudes ante la PCR-EH y la RCP de la población. De este modo, se podría aspirar a mejorar la capacitación de la población ante emergencias cardiacas.
 

Material y método 

Diseño del estudio 

Se realizó un estudio cuasiexperimental sin grupo control, en el que se evaluó la adquisición de conocimientos tras formación en técnicas de RCP básica en el ámbito de la comunidad. La iniciativa del proyecto surgió en el seno de la Mesa de Salud de Arrigorriaga, desde donde se promovió la participación (11). Se identificaron agentes referentes de la comunidad, que recibieron formación en RCP básica y que trasladaron a otros ámbitos (formación en cascada), con el objetivo de aumentar el número de personas formadas. Las formaciones, tanto a las personas referentes comunitarias, como aquellas que posteriormente se realizaron en sus correspondientes ámbitos, se desarrollaron entre abril de 2022 y junio de 2023.
 

Población a estudio 

Se identificaron dos poblaciones diferentes: a) Las personas referentes de los diferentes ámbitos del municipio que mostraron compromiso para participar en la sesión de formación y posteriormente realizar la formación en cascada, b) La población general, es decir, las personas de los diferentes ámbitos municipales (ayuntamiento, policía municipal, polideportivo, escuela, instituto, clubs deportivos, asociaciones, etc.) que recibieron formación por parte de las personas referentes.
 

Selección de participantes 

Se empleó un sistema de muestreo por oportunidad. En primer lugar, se realizó la captación y formación de las personas referentes comunitarias y, en segundo lugar, se procedió a la captación y formación de la ciudadanía. La captación de referentes y la difusión del proyecto se realizó a través de la Mesa de Salud, mediante los canales de comunicación municipales, y a través de carteles y correos electrónicos enviados a asociaciones, clubes deportivos y entidades con DEA.
 

Intervención: formación en cascada 

Las sesiones dirigidas a las personas referentes fueron impartidas por profesionales de enfermería del centro de salud (duración de dos horas), y se facilitó un kit de formación que incluía una presentación multimedia, hojas de información, mapa de DEA del municipio y material de apoyo docente. Las sesiones de formación fueron principalmente prácticas y contaron con maniquíes y DEA simulador.
 

Variables de estudio y análisis 

Se registraron variables sociodemográficas (sexo, edad, estudios y formación previa en RCP) de los distintos grupos de participantes (personas referentes comunitarios; ciudadanos/as que recibieron la formación y personas que finalmente participaron en la encuesta).
En el grupo de personas que participaron en las encuestas se registraron datos relativos a la percepción y los conocimientos sobre RCP y DEA.
Para evaluar las percepciones y los conocimientos sobre RCP y DEA antes y 40 días después de la intervención se empleó el “Cuestionario sobre conocimientos y actitudes de los ciudadanos del País Vasco ante la reanimación cardiopulmonar y los desfibriladores externos semiautomáticos”. Esta herramienta ha sido empleada en estudios previos y contextos similares y presenta unos criterios de validez y fiabilidad aceptables (7).
La normalidad de la distribución de datos se analizó mediante el test de Shapiro Wilk. En el análisis descriptivo, las variables categóricas se describieron en frecuencias absolutas y porcentajes, y en el caso de variables cuantitativas continuas, se presentaron como media y desviación típica. Para la comparación de proporciones en los resultados previos y posteriores a la intervención se utilizó la prueba de McNemar. Para el análisis se empleó el paquete estadístico SPSS v.23, adoptando el límite de significación estadística cuando el valor bilateral de p< 0,05.
Se incorporó la perspectiva de género durante el estudio, tanto en la recogida de variables como promoviendo la participación de mujeres en las formaciones, partiendo de la hipótesis de que en ciertos ámbitos como podrían ser los clubes deportivos participarían más hombres. Del mismo modo, se incorporó la perspectiva de equidad, haciendo un especial esfuerzo en identificar poblaciones y personas en riesgo de exclusión social, agentes y asociaciones que trabajen en este ámbito y que participaran en las formaciones.
El estudio fue aprobado por el Comité de Ética de Euskadi (PI2022044). Todos los participantes firmaron el consentimiento informado.
 

Resultados 

Entre los 27 clubes deportivos y asociaciones socioculturales contactadas, participaron en el proyecto 13 de ellas (48%), convirtiéndose en referentes seis personas de clubes deportivos, siete de asociaciones socioculturales y 14 pertenecían a otros ámbitos (policía municipal, instituto, escuela, farmacia, clínica dental, hotel y polideportivo). Desde abril de 2022 hasta junio de 2023 se realizaron cinco sesiones formativas dirigidas a referentes en las que participaron 27 personas de los citados ámbitos. La media de edad fue de 50 años, siendo el 63% mujeres, el 55,6% con estudios universitarios y el 66,7% con conocimientos previos sobre RCP (Tabla 1).
 
 
De las 27 personas formadas como referentes, 12 desarrollaron formación en cascada en sus respectivos ámbitos (44,4%). Se realizaron 13 sesiones formativas en las que participaron 116 personas de diferentes ámbitos (Figura 1): cinco sesiones al profesorado de la escuela (50 participantes), dos con familias de la escuela (18 participantes), una sesión impartida por las educadoras sociales dirigidas a personas en situación de exclusión social (ocho participantes), tres sesiones al profesorado del instituto (22 participantes) y dos sesiones en la casa de las mujeres (18 participantes). La media de edad de las personas participantes fue de 46,7 años, el 78,4% mujeres, el 68,1% con estudios universitarios y el 57,8% tenía formación previa en RCP (Tabla 2).
 
 
 
 
En cuanto a la evaluación de los conocimientos adquiridos, el 23% realizó el cuestionario POS- que se envió por SMS a los
40 días de realizar la formación. Se efectuó el análisis con las 33 personas que respondieron al cuestionario preintervención y posintervención (Tabla 3), valorando así la autopercepción, las actitudes y los conocimientos.
 
 
Respecto a la autopercepción, el 78,1% de los participantes consideró que sabría aplicar la RCP y los DEA; resultados notablemente mejores que los previos a la formación (Tabla 4). Sin embargo, no se vieron alteradas las percepciones sobre la importancia de la RCP y la DEA, antes y después de la intervención (Tabla 5), que ya partían de un nivel alto de importancia percibida.
En cuanto a las actitudes, mejoraron en todos los ítems consultados. El 72,7% de las personas aplicaría compresiones torácicas (después de haber recibido formación), frente al 51% que lo hubiera hecho antes de la formación. En la evaluación de conocimientos, el porcentaje de aciertos fue del 71,2% en el cuestionario preintervención frente al 87,3% en el posintervención (Tabla 6).
 
 
 
 
En la elaboración del mapa (12) de DEA se identificaron cuatro dispositivos que no estaban registrados en la web institucional, que se actualizó y difundió en las formaciones y mediante los canales de comunicación municipales.
 

Discusión 

Los resultados de la iniciativa de formación comunitaria en RCP reflejan un cambio positivo en el conocimiento y la confianza de las personas participantes, lo que sugiere que la formación en cascada es una estrategia efectiva para mejorar las habilidades en RCP en la comunidad. En comparación con otros estudios, se observa una tendencia consistente en la mejora de la preparación ante PCR-EH mediante programas de formación (13). Muestra de ello son los resultados de un estudio en el que estudiantes de medicina formaban a la ciudadanía, donde se observó que aquellos que realizaron la actividad docente tuvieron un desempeño teórico y práctico superior en los test posteriores frente a los previos. A su vez, la comunidad pudo aprender de los estudiantes mostrando que la actividad didáctica puede ser una metodología eficaz de aprendizaje, además de permitir la difusión del conocimiento (14). Cabe señalar que muchos programas de formación descritos en la literatura se desarrollan en el ámbito educativo (15,16), dirigidos tanto al profesorado (17) como al alumnado (18), lo que sugiere que este ámbito resulta estratégico ya que más del 60% de los estudiantes alcanza un aprendizaje satisfactorio y más de dos terceras partes de estos aún lo mantienen un año después, que estos porcentajes son incluso mejores cuando son los profesores del propio centro (previamente formados en RCP) los que se encargan de desarrollar completamente el programa (19,20).
La particularidad del estudio radica en la estrategia de formación en cascada, que no solo capacita a individuos, sino que promueve una red de conocimientos que se extiende a través de la comunidad (21,22). Una de las claves del éxito del proyecto probablemente sea contar con una red ciudadana que permite desarrollar iniciativas comunitarias con mayor facilidad (23). De hecho, en la actualidad, se está desarrollando un proyecto para la detección y prevención de la soledad no deseada (24). Este tipo de iniciativas probablemente contribuyan a generar y fortalecer la red ciudadana, promoviendo la participación en salud (25), de modo que el beneficio vaya más allá de la formación y el entrenamiento en RCP.
Tal y como se ha mencionado, se consideró la perspectiva de género y de equidad, y en relación con esta última cabe señalar que la disposición a realizar o aprender RCP por parte de personas desfavorecidas es comparable con la población general; sin embargo, la confianza para realizar RCP está condicionada por el nivel socioeconómico (26). Por tanto, resulta necesario mejorar la formación y capacitación de las personas más vulnerables y la de su entorno, que además tienen un mayor riesgo cardiovascular (27,28).
Cabe destacar el potencial multiplicador de esta estrategia, ya que por cada persona formada por las profesionales sanitarias se instruyó a otras 4,2 personas. Esto muestra que la capacitación en RCP a nivel comunitario no solo es viable sino también efectiva (29,30), lo que podría animar a las autoridades de salud pública y a los responsables de la formulación de políticas a promover programas similares (31,32).
A pesar de los resultados alentadores, el tamaño muestral reducido y la ausencia de un grupo control limitan la capacidad de atribuir los cambios observados únicamente a la intervención. Para futuras investigaciones, sería interesante realizar estudios controlados que proporcionen una evidencia más sólida, y que a su vez evalúen la adquisición de conocimientos y habilidades a largo plazo. La evidencia disponible sugiere que el conocimiento y las habilidades disminuyen entre seis meses y un año después de la capacitación y que las habilidades disminuyen más rápido que el conocimiento (33). Por tanto, estas formaciones deben tener continuidad y repetirse periódicamente (34) para capacitar y recapacitar en RCP a esta red. Y es precisamente la factibilidad de esta estrategia de formación la que puede contribuir a asegurar su permanencia en el tiempo, y que, junto a su capacidad de multiplicar personas formadas, pueden contribuir a construir comunidades cardioprotegidas.
 

Conclusiones 

Esta iniciativa sugiere que la formación en cascada puede potenciar la capacitación en RCP a nivel comunitario. A pesar de ciertas limitaciones metodológicas, los resultados sugieren que programas similares podrían ser una herramienta valiosa en la mejora de la respuesta a las PCR-EH. Este estudio pone de relieve la importancia de la educación en RCP en la comunidad y abre caminos para futuras investigaciones y políticas en este campo vital.
 

Conflicto de intereses 

Ninguno.
 

Financiación 

Ninguna.
 

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Originales - 4 - Conocimientos sobre la enfermedad en adultos con diagnóstico de diabetes mellitus del municipio de Teziutlán, Puebla, México

 
Cómo citar este artículo:
Suárez Máximo JD, Vidal Quinto LA, Telumbre Terrero JY. Conocimientos sobre la enfermedad en adultos con diagnóstico de diabetes mellitus del municipio de Teziutlán, Puebla, México. RIdEC 2024; 17(2):37-44.
 
Fecha de recepción: 12 de abril de 2024.
Fecha de aceptación: 13 de noviembre de 2024.
 

Autores

 
1 Juan Daniel Suárez Máximo
2 Lorenzo Antonio Vidal Quinto
3 Juan Yovani Telumbre Terrero
 
  1. Doctorante en Ciencias de Enfermería, Campus Celaya-Salvatierra, Universidad de Guanajuato (UG). Maestro en Salud Pública (UPAEP); Licenciado en Enfermería (BUAP); Coordinador por la Vocalía México de la Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC).
  2. Pasante del Programa de Licenciatura de Enfermería y Obstetricia. Puebla (México).
  3. Docente Investigador de la Licenciatura en Enfermería de la Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad Autónoma del Carmen. Ciudad del Carmen Campeche (México).

 

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Resumen 

Objetivo: determinar el nivel de conocimiento que tienen las personas con diabetes mellitus (DM) sobre su enfermedad del municipio de Teziutlán, Puebla, México.
Metodo: estudio cuantitativo transversal descriptivo realizado en 228 participantes con DM de tres unidades de salud de Teziutlán, a través de una muestra no probabilística; se utilizó la prueba Diabetes Knowledge Questionnaire (DKQ-24).
Resultados: se identificó una media de 46,13 años (DE= 13,66), predominó el sexo femenino (65,8%) y el estado civil casado (48,7%). El 32% de los participantes padece diabetes mellitus tipo I (DMTI) y el 68%, tipo II (DMTII). Se obtuvo una media de 16,28 puntos (DE= 2,9). Por sexo, las mujeres obtuvieron una puntuación de 16,45 (DE= 3,0) y los hombres de 15,94 (DE=
2,8). Al categorizar las puntuaciones, el 56,1% se ubicó en un conocimiento moderado.
Conclusión: los hallazgos muestran un conocimiento moderado en la población de estudio, estos pudieran estar determinados por factores personales como la edad y el sexo, además de factores asociados al tipo de DM, así como al medio donde los sujetos nacen, crecen y se reproducen.
Palabras clave: diabetes mellitus; adulto; alfabetización en salud; autocuidado.
 

Abstract 

Knowledge about the disease in adults with a diagnosis of Diabetes Mellitus in the municipality of Teziutlán, Puebla, Mexico
 
Objective: ito determine the level of knowledge that people with DM have about their disease in the municipality of Teziutlán, Puebla, Mexico.
Method: descriptive cross-sectional quantitative study conducted in 228 participants with diabetes mellitus in three health units of Teziutlán, Puebla, Mexico, through a non-probabilistic sample, using the Diabetes Knowledge Questionnaire (DKQ-24).
Results: an average of 46.13 years was identified (SD= 13.66), the female sex predominated (65.8%) and the marital status was married (48.7%). 32% of the participants suffer from Diabetes Mellitus type I (DMTI) and 68% from type II (DMTII). An average of 16.28 points (SD= 2.9) was obtained; by sex, women obtained a score of 16.45 (SD= 3.0) and men 15.94 (SD=
2.8). When categorizing the scores, 56.1% were in moderate knowledge.
Conclusion: the findings show moderate knowledge in the study population, these could be determined by personal factors such as age and sex, in addition to factors associated with the type of DM, as well as the environment where the subjects are born, grow and reproduce.
Key words: diabetes mellitus; adult; health literacy; self-care.
 

Introducción 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que la diabetes mellitus (DM) es una enfermedad que sucede cuando el páncreas no crea suficiente insulina o el cuerpo no la utiliza adecuadamente, lo que implica una seria de problemas a la salud a corto, mediano y largo plazo. Se estima que en todo el mundo la prevalencia de esta enfermedad ha aumentado significativamente, de manera particular en los países de ingresos bajos y medianos causando ceguera, insuficiencia renal, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y amputación de miembros inferiores (1). En este sentido, la Federación Internacional de Diabetes estima que existen 537 millones (10,5%) de personas con diabetes en todo el mundo, además destaca que la alimentación saludable, el ejercicio físico regular, el mantenimiento de un peso normal y la evitación del consumo de tabaco o alcohol previenen la diabetes o retrasan su aparición, por lo que resulta interesante abordar los determinantes de la salud en esta población (2).
En Latinoamérica hay aproximadamente 62 millones de personas enfermas, lo que evidencia un incremento importante de personas con la enfermedad y se prevé que alcanzará la cifra de 109 millones para el 2040, posicionándose como la segunda causa de pérdida funcional por discapacidad (3). En México, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2021 señala que en los últimos 10 años la incidencia se incrementó de 9,2% a 10,2%, con mayor proporción en mujeres, lo que representa a 14,1 millones de personas con diabetes, reportando una tasa anual de fallecimiento de 361 por 100 mil habitantes en diabetes tipo II, y la de tipo I es de 30 decesos por 100 mil. Así también, el Instituto Nacional de Estadística y Geográfica reporta que en el estado de Puebla están registradas 592.495 personas (9,0%) con diabetes y en el municipio de Teziutlán se registran 10.773 con la misma patología (4).
En consonancia con lo anterior, diversas investigaciones identificaron que los adultos mayores presentan limitaciones en la comprensión de la DM y esto constituye un factor crucial en su capacidad para mantener prácticas continuas de autocuidado que contribuyan al manejo de la enfermedad y evitar complicaciones que limitaran la integridad de las personas (5).
Además, hay que considerar que gran parte del cuidado recae en la propia persona y su familia, donde la falta de información y entendimiento de la patología se pudiera convertir en un obstáculo para aceptar de la mejor manera el tratamiento con las prácticas necesarias de autocuidado (6). Es ahí donde se reconoce que el conocimiento sobre esta enfermedad se encuentra directamente relacionado con la adopción de un estilo de vida saludable, pieza fundamental tanto en la prevención como en el tratamiento de esta (7).
Las complicaciones de esta patología se manifiestan a través del daño en los vasos sanguíneos, problemas renales y neurológicos, lo que repercute en la calidad de vida y mortalidad prematura, además de asociarse a un deficiente estilo de vida, ligado a la alimentación, el sedentarismo, el consumo de alcohol y tabaco, entre otros (8). No obstante, la manera en que los pacientes afrontan la DM siempre será desde el grado de información que tengan, las emociones que presenten y la motivación que reciban, pues son aspectos importantes para un autocuidado saludable. Por tanto, el nivel de conocimientos de la persona sobre su salud permite saber sobre la diabetes, desde su control y el autocuidado, contribuyendo a mejorar o mantener el estilo de vida, que se traduce en una mejora o incremento de la calidad de vida de los adultos (9).
Por ello, la importancia de fomentar y aumentar el conocimiento de los adultos puede determinar de forma favorecedora a un adecuado apego al tratamiento, a una apropiada alimentación, al fomento de la actividad física, a la monitorización de la glucosa, al cuidado de los pies, todos ellos aspectos fundamentales para gestionar eficientemente la diabetes de forma autónoma (10). Así, la evaluación de los conocimientos vinculados a la diabetes constituye un paso inicial y crucial para educar y lograr un comportamiento eficaz hacia el mejoramiento de la enfermedad (8). Sobre la base de lo anterior, se pretende describir el nivel de conocimiento que tienen las personas con DM sobre su enfermedad del municipio de Teziutlán, Puebla, México. Se espera que los resultados permitan caracterizar a la población de estudio, además de identificar los conocimientos sobre la enfermedad, para que puedan diseñar e implementar intervenciones de enfermería basadas en evidencia que permitan empoderar a los pacientes y enfrentarla de forma eficaz y eficiente.
 

Método 

Diseño de estudio 

Estudio cuantitativo no experimental de corte transversal de tipo descriptivo (11) llevado a cabo del 4 de septiembre al 12 de octubre del 2023, en los centros de salud de Tomaquilapa, Ixticpan y Tacopan pertenecientes al Municipio de Teziutlán, Puebla, México (12).
 

Población, muestreo y muestra 

La población estuvo constituida por adultos y adultos mayores que acudieron a la consulta externa en los centros de salud antes mencionados, se utilizó un muestreo no probabilístico por conveniencia, dada la accesibilidad de los participantes, quedando una muestra conformada por 228 sujetos. Se tomaron en cuenta los criterios inclusión: pacientes mayores de 30 años con diagnóstico de diabetes tipo 1 y 2 que lleven su control en el centro de salud señalado y que decidieron participar de manera voluntaria en la investigación. Como criterios de exclusión, las personas que tuvieran alguna alteración mental y los casos cuyas encuestas estuvieran incompletas, que finalmente no hubo.
 

Instrumentos de recolección de los datos 

Para la obtención de los datos se utilizó un cuestionario de datos sociodemográficos elaborado ex profeso por los investigadores y para los fines de esta investigación, constituido por ocho interrogantes, como edad, sexo, estado civil, DM gestacional, antecedentes familiares y actividad física.
Asimismo, se usó la prueba Diabetes Knowledge Questionnaire (DKQ-24) (13), la cual consta de 24 ítems con tres opciones de respuestas (Sí, No, No sé), obteniendo una valoración de 1 punto las preguntas 2, 5, 6, 8, 11, 14, 15, 16, 18, 19, 20 con respuesta “Sí”, así como las preguntas 1, 3, 4, 7, 9, 10, 12, 13, 17, 21, 22, 23, 24 con respuesta “No”. Para su interpretación se suman los valores obtenidos en cada afirmación y se establecen los siguientes puntos de corte del DKQ-24, que determinan el nivel de conocimiento sobre la diabetes: < 11= conocimiento pobre, 11-17= conocimiento moderado y > 17= buen conocimiento (17). La confiabilidad de esta escala se considera aceptable en esta investigación y se obtuvo un alfa de Cronbach de 0,87.
 

Procedimiento de recolección de datos 

La obtención se hizo presencial, primero se aprobó el proyecto y a continuación se solicitaron los permisos correspondientes para asistir a los centros de salud. Obtenidos los permisos se programaron horarios para poder abordar a los pacientes que asistían a la consulta para el manejo de la enfermedad. Si aceptaban, se les entregaba un consentimiento informado y después la escala de medición. Culminado el llenado de los instrumentos, se les agradeció su participación.
 

Aspectos éticos 

Cabe mencionar que esta investigación se adecuó a los requerimientos éticos de la Asociación Médica Mundial y la Declaración de Helsinki (14), donde se definen los elementos mínimos que deben cumplir de manera obligatoria los investigadores que realizan esta actividad en seres humanos, cumpliendo de manera obligatoria las disposiciones que establece el marco jurídico-legal vigente.
 

Análisis de la información 

Los datos fueron capturados y analizados en el programa el Statistical Package For The Social Sciences (SPSS) V.25, haciendo uso de la estadística descriptiva por medio de frecuencias, proporciones, medidas de tendencia central y de dispersión.
 

Resultados 

La media de edad de las personas participantes es de 46,13 años (DE= 13,66), con mayor predominio femenino en un 65,8% y estado civil casado (48,7%), seguido de unión libre (31,1%). En relación con la patología, el 85,4% de los adultos lleva de
1 a 10 años con diagnóstico de DM, el 32% de los participantes corresponde a DM tipo I (DMTI) y el 68% al tipo II (DMTII).
Al indagar sobre los antecedentes patológicos, el 82% mencionó que algún familiar ha padecido DM, 49,6% hipertensión arterial, 43,4% obesidad y el 21,5% algún tipo de cáncer.
Sobre la práctica de actividad física, el 78,1% afirmó realizar caminatas de al menos 30 minutos al día y el 5,3% natación. Al analizar los conocimientos que tienen los sujetos sobre la enfermedad de manera global, el 90,8% considera que comer mucha azúcar causa DM y el 90,4%, señaló de forma afirmativa que una glucemia de 210 mg/dl es alta. Por otra parte, el 89,9% manifestó que padecer diabetes mellitus sin tratamiento conlleva a una elevación de la glucosa, además si padece la enfermedad, sus hijos la sufrirán. Se destaca que el 86,8% considera que la diabetes mellitus no se puede curar (Tabla 1).
 
 
En relación con la puntuación total de la escala se obtuvo una media de 16,28 puntos (DE= 2,9), por sexo las mujeres obtuvieron una puntuación de 16,45 (DE= 3,0) y los hombres de 15,94 (DE= 2,8). Ahora bien, al categorizar las puntuaciones de la escala, el 56,1% se ubicó en un conocimiento moderado (Gráfico 1).
Al analizar por variables sociodemográficas, se identificaron puntuaciones de un conocimiento “Bueno” en las mujeres, en personas con DM tipo II y las personas que asisten a la unidad de salud de Tomaquilapa (Tabla 2).
 
 
 
 

Discusión 

En función de los resultados con respecto a las enfermedades crónicas no transmitibles presentes en algún miembro de la familia, se determina que concuerda con lo reportado por investigadores de Ecuador (15), quienes identificaron que en la población en estudio el 84,4% tenía antecedentes patológicos, donde prevalece el sobrepeso y la obesidad. En Cuba (16), el
52% de los pacientes presentó antecedentes de DM, hipertensión arterial y sobrepeso, lo que permite predecir el riesgo y realizar detecciones oportunas y medidas preventivas a corto, mediano y largo plazo. Estos datos muestran la importancia de realizar una valoración integral y minuciosa en los individuos sanos que permitan evaluar la susceptibilidad al desarrollo de enfermedades crónicas como hipercolesterolemia, hipertensión arterial y diabetes mellitus, con el fin de realizar intervenciones oportunas (9).
Dentro de la actividad física de la muestra, en contraste con otros estudios, se determina que en Ecuador (15) el 62% de las personas con DM realizaba actividad física de moderada a intensa al día o tres veces por semana. En este sentido, la actividad física está asociada con el estilo y la calidad de vida de la persona, siendo una práctica rutinaria y coordinada, con una recomendación de llevarla a cabo en una duración de 30 minutos de actividad aeróbica moderada o 15 minutos de forma vigorosa, en algunos casos de forma combinada, impactando en la reducción de complicaciones (17) que marcan la diferencia entre salud y enfermedad. Esta actividad representa un área para el profesional de enfermería que está inmerso en la atención de los pacientes desde el ámbito clínico o comunitario, para concientizar a la población sobre la importancia de un estilo de vida saludable, que repercuta en la aparición de la DM o mejorar su control (15).
En consonancia con el tema central de la investigación, de manera general, las afirmaciones que considera el consumo excesivo de azúcar causa DM, así como las consideraciones de los niveles altos en la prueba de glicemia capilar y que la diabetes es una enfermedad no curable, lo que concuerda con lo descrito en Montería, Colombia (18), donde se evidencia que muchos pacientes conocen su diagnóstico y tienen claridad sobre la patología, contrario a lo reportado en Venezuela (9), donde se encontraron diferencias significativas en los conocimientos sobre la enfermedad en adultos con y sin tratamiento.
Por otra parte, resalta la importancia sobre la forma en que se preparan los alimentos, el proceso de cicatrización de las heridas cuando se padece DM y que derivado de la enfermedad se pueden presentar problemas de circulación, lo que concuerda con lo reportado en Puerto Rico (5), donde los participantes identifican las acciones que pudieran mejorar o empeorar su salud, así como las complicaciones derivadas de la enfermedad que repercuten en la calidad y el estilo de vida de los sujetos.
Ante estas variaciones se debe considerar que la DM es una enfermedad que se puede controlar con acciones de autocuidado, basadas en una dieta saludable, ejercicio regular y adherencia al tratamiento farmacológico, todo ello previo conocimiento del paciente y con la disponibilidad de adoptar un estilo de vida adecuado (17). Así también es imprescindible considerar que la educación en diabetes representa una herramienta eficaz para empoderar a los pacientes sobre el control y manejo de la enfermedad, donde se pretende que el paciente logre obtener y mantener conductas que lleven a un óptimo manejo de la vida con la enfermedad (16).
Al categorizar la puntuación de la escala, se ubicó en un conocimiento moderado seguido de un conocimiento bueno, contrario a lo señalado en Perú (19), donde predominó un conocimiento inadecuado, con un 68,2% (el adecuado fue del
31,8%), lo que se asocia a un bajo nivel en la adherencia al tratamiento. Así también, en Colombia (18) el 54% expresó conocer sobre su enfermedad y el 46% respondió no conocer sobre ella.
Ante este panorama, la educación en DM juega un papel importante, donde se adquieren conocimientos y habilidades para cambiar conductas, que conlleven al empoderamiento en el autocuidado con el objetivo central de mejorar el control de la glucosa y prevenir complicaciones (20). Aquí los profesionales de la salud asumen el reto de que los pacientes desarrollen habilidades, destrezas, aptitudes y actitudes que le permitan manejar bien esta enfermedad (18).
Para el profesional de enfermería, estos hallazgos representan un área de oportunidad para poder encaminar acciones dirigidas a la educación y promoción de la salud, tanto en el ámbito comunitario como clínico, que permitan la prevención de la enfermedad y complicaciones, pero también para el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad a través de una sensibilización del sujeto para que afronte la enfermedad y su evolución de una forma eficaz y eficiente.
Los resultados revelan que las mujeres tienen mayores conocimientos en comparación con los hombres, así como las personas con DM, lo que evidencia la presencia de factores que pudieran determinar el nivel de conocimientos en las personas que padecen diabetes y condicionar su estado de salud. Ante ello, es inminente la importancia de la educación para la salud, basada en el autocuidado (21), la cual no solo se ha de basar en el contenido y el conocimiento que tiene que incorporar y entender el paciente, sino que obedece directamente a la actitud flexible y de soporte que ha de promoverse y mantenerse tanto en el paciente como en el equipo educador (22). Ahora bien, es importante mencionar que no solo se deben considerar factores individuales que determinen los conocimientos, sino también aspectos sociales y del propio sistema de salud. En este sentido, investigadores de España señalan que el nivel de estudios, el área geográfica y la accesibilidad a los servicios de salud son aspectos que, sumados al autocuidado, pueden influir en el nivel de conocimientos de las personas con DM (23).
 

Conclusiones 

La presente investigación permitió abordar los conocimientos sobre la enfermedad en paciente con DM. Los resultados evidencian la alta prevalencia de diabetes, principalmente DMTII, con una duración de 1 a 10 años en la población en estudio, además se identificó que los antecedentes familiares pudieran representar un factor de riesgo ante la presencia de las enfermedades no transmisibles y la importancia de fomentar estilos de vida saludables en la población de interés que permita la prevención de complicaciones.
Los participantes mostraron conocimientos sobre la enfermedad, desde su etiología, factores de riesgo y de protección, tratamientos y complicaciones en las personas que lo padecen, sin dejar de lado las implicaciones para la familia y el sistema de salud, dado que las tendencias indican un aumento en el número de personas con la enfermedad.
Así también los resultados muestran que las mujeres presentan puntuaciones algo mayores que los hombres, lo que representa un interés, ya que la mujer suele ser responsable del cuidado de la familia y del cuidado de su propia salud. De igual manera, los resultados constituyen un área de oportunidad para el profesional de enfermería, siendo el enlace entre la población y los servicios de salud, donde se pueden fomentar estilos de vida saludables en personas que padecen DM como estrategia para evitar complicaciones y prevención en personas que no padecen la enfermedad.
 

Conflicto de intereses 

Ninguno.
 

Financiación 

Ninguna.
 

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Revisiones - 1 - Síndrome de una la sensibilidad química múltiple: manifestaciones clínicas, factores desencadenantes y prevención

 
Cómo citar este artículo:
Sancho Sinisterra P, Soriano García M. Síndrome de la sensibilidad química múltiple: manifestaciones clínicas, factores desencadenantes y prevención. RIdEC 2024; 17(2):46-56.
 
Fecha de recepción: 17 de junio de 2024.
Fecha de aceptación: 6 de noviembre de 2024.
 

Autores

 
1 Pablo Sancho Sinisterra
2 Marta Soriano García
 
  1. Enfermero. Escuela Universitaria de Enfermería de Teruel. Hospital Obispo Polanco. Teruel (España).
  2. Enfermera de Quirófano. Hospital Obispo Polanco. Teruel (España).
 
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Resumen 

Introducción: la sensibilidad química múltiple (SQM) es un trastorno crónico en el que la exposición a concentraciones bajas de sustancias químicas provoca la aparición de varios síntomas. El objetivo de esta revisión es determinar las principales manifestaciones clínicas, factores de riesgo o desencadenantes y medidas preventivas para la SQM.
Método: revisión bibliográfica narrativa. La búsqueda se realizó en SciELO, Pubmed, Scopus, Web of Science y Google Scholar.
Se seleccionaron artículos originales y de revisión, publicados a partir de 2014, en inglés o español, y con información referente a la SQM. Mediante planillas CASPe y clasificación CEBM se evaluaron la calidad documental y los niveles de evidencia.
Resultados: el perfil general obtenido corresponde con el de una mujer de entre 40 y 50 años con antecedentes de asma y alergia. Los desencadenantes más frecuentes fueron productos de limpieza, perfumados, formaldehídos y COVs. Las principales manifestaciones clínicas fueron respiratorias y neurológicas, seguidas de las gastrointestinales y cognitivas. Las medidas preventivas fueron la evitación de los desencadenantes y el acondicionamiento de los espacios. La psicoterapia y el tratamiento sintomático fueron efectivos en algunos casos. Se ha propuesto la creación de un kit de emergencia personal.
Conclusiones: la SQM es un trastorno crónico que puede requerir un aislamiento completo. Las principales manifestaciones son respiratorias y neurológicas. Actualmente, la prevención de la SQM va dirigida al acondicionamiento del espacio y evitación de los desencadenantes. Podría ser beneficioso incluir psicoterapia en el abordaje de la afección, así como educar a las personas del entorno cercano del paciente.
Palabras clave: sensibilidad química múltiple; factores de riesgo; intolerancia ambiental idiopática; prevención; signos y síntomas.
 

Abstract 

Multiple chemical sensitivity syndrome: clinical manifestations, triggers and prevention 
 
Introduction: multiple chemical sensitivity (MCS) is a chronic disorder in which exposure to low concentrations of chemicals results in the development of various symptoms. The aim of this review is to determine the main clinical manifestations, risk factors or triggers and preventive measures for MCS.
Method: narrative literature review. The search was conducted in SciELO, Pubmed, Scopus, Web of Science and Google Scholar. Original and review articles were selected, published from 2014 onwards, in English or Spanish, and with information on MCS. Documentary quality and levels of evidence were assessed using CASPe templates and CEBM classification.
Results: the general profile obtained corresponds to that of a woman aged between 40 and 50 years with a history of asthma and allergy. The most frequent triggers were cleaning products, perfumes, formaldehyde and VOCs. The main clinical manifestations were respiratory and neurological, followed by gastrointestinal and cognitive. Avoidance of triggers and space conditioning were the main preventive measures. Psychotherapy and symptomatic treatment were effective in some cases. The creation of a personal emergency kit has been proposed.
Conclusions: MCS is a chronic disorder that may require complete isolation. The main manifestations are respiratory and neurological. Currently, prevention of MCS is aimed at space conditioning and avoidance of triggers. It may be beneficial to include psychotherapy in the management of the condition, as well as educating people in the patient’s close environment.
Key words: multiple chemical sensitivity; risk factors; idiopathic environmental intolerance; prevention; signs and symptoms.
 

Introducción 

El síndrome de la sensibilidad química múltiple (SQM) o intolerancia ambiental idiopática es un trastorno multisistémico, crónico e incapacitante que consiste en la aparición de una amplia variedad de síntomas tras la exposición a concentraciones de agentes químicos consideradas como no perjudiciales para la población general. La manifestación de los síntomas puede presentarse tanto de forma gradual (tras exposición a dosis bajas), como de forma brusca (tras un alto nivel de exposición) (1,2). La persona que sufre este síndrome presenta una pérdida de la tolerancia a una cantidad cada vez mayor de productos químicos, lo que le obliga a evitar una gran variedad de lugares y situaciones. Esto interfiere de forma significativa en su entorno social, laboral y familiar, pudiendo llegar a requerir, en casos graves, el aislamiento completo.
La SQM es una entidad patológica de diagnóstico fundamentalmente clínico. En 2011, se establecieron por consenso de expertos una serie de criterios para el diagnóstico del síndrome (Cuadro 1). Una herramienta diagnóstica muy empleada es el cuestionario Quick Environmental Exposure Sensitivity Inventory (QEESI), el cual está validado para determinar la gravedad y el pronóstico de la SQM (3,4).
 
 
Se estima que la SQM afecta hasta a un 0,04% de la población general, cifra que asciende al 19% en personas con alergia (4). Sin embargo, estos datos deben tomarse con precaución dada la dificultad para determinar las cifras reales de prevalencia. Esto es debido a que gran parte de la información recogida procede de cuestionarios autocumplimentados por pacientes que se consideraban a sí mismos como enfermos de SQM, mostrando prevalencias de entre el 0,48% y el 15,90% (5).
La etiopatogenia del síndrome de la sensibilidad química múltiple es actualmente desconocida, aunque la evidencia sugiere un posible origen multifactorial en el que se ven involucradas variables genéticas, neurológicas, inmunológicas, endocrinas y anatómicas (4,6). La SQM a menudo se presenta de forma comórbida con otras enfermedades como la fibromialgia, la migraña y el síndrome de la fatiga crónica (4-7). Su desarrollo conlleva una disfunción de la esfera física, social y psicológica, lo que repercute negativamente en la calidad de vida de las personas que la padecen. Se trata de un síndrome poco conocido y estudiado, cuyas opciones terapéuticas son limitadas (4-10). Dado el gran impacto que la SQM puede llegar a tener en la vida de las personas, se ve justificado el estudio de la evidencia actual sobre cuáles son los factores de riesgo y los desencadenantes de esta enfermedad, cuáles son sus manifestaciones clínicas y qué formas hay de prevenirlas. En la presente revisión se ofrece una síntesis del conocimiento más actualizado teniendo en cuenta lo recogido, no solo en otras revisiones bibliográficas y sistemáticas, sino también en los estudios observacionales y los casos clínicos más recientes en los que se han encontrado aspectos novedosos y relevantes referidos a manifestaciones clínicas, desencadenantes y medidas preventivas para este trastorno. Una síntesis actualizada sobre las características de la SQM a través de una revisión bibliográfica podría constituir una buena base teórica para el desarrollo de nuevos estudio observaciones que contribuyan a comprender mejor esta enfermedad. Por lo tanto, se plantea la siguiente pregunta de investigación: ¿cuáles son las manifestaciones clínicas, los factores de riesgo y desencadenantes, y las medidas de prevención para el síndrome de la sensibilidad química múltiple? El objetivo de este trabajo es el de determinar las principales manifestaciones clínicas, factores de riesgo o desencadenantes y medidas preventivas para la SQM.
 

Método 

Las variables de estudio fueron las siguientes: manifestaciones clínicas de la sensibilidad química múltiple, factores de riesgo o desencadenantes de la sensibilidad química múltiple y medidas de prevención de la sensibilidad química múltiple.
Se llevó a cabo una revisión bibliográfica de la literatura. Para ello se consultaron las bases de datos electrónicas Pubmed, Scopus, Web of Science y SciELO, y el buscador de literatura científica Google Scholar. En la estrategia de búsqueda emplearon los Medical Subject Headings (MeSH) (multiple chemical sensitivity, signs and symptoms, risk factors, primary prevention). Las combinaciones de búsqueda se realizaron utilizando los operadores booleanos AND y OR. En cada base de datos se llevó a cabo, en primer lugar, una búsqueda simple a través del término “multiple chemical sensitivity”. A continuación, para refinar los resultados, se empleó la combinación “multiple chemical sensitivity” AND (“risk factors” OR “primary prevention” OR “signs and symptoms”). También se consultaron páginas web de interés como la del Ministerio de Sanidad y la de la Asociación de Afectados por el Síndrome de la Fatiga Crónica y por el Síndrome de la Sensibilidad Química Múltiple de la Comunidad de Madrid (Asociación SFC-SQM Madrid).
Los criterios de inclusión fueron artículos originales, de revisión y casos clínicos, de un máximo de 10 años de antigüedad, en inglés o en español, y que contuvieran información referente a la sensibilidad química múltiple, sus factores de riesgo o desencadenantes y sus medidas de prevención. Los criterios de exclusión fueron tesis doctorales, literatura gris y publicaciones que no respondieran a los objetivos de la revisión. Para la lectura crítica de los artículos de casos y controles, estudios de cohortes y revisión sistemática se emplearon las planillas de CASPe, aceptándose los trabajos con una puntuación igual o superior a 8 (11). Cada uno de los estudios incluidos se clasificó según los niveles de evidencia y grados de recomendación de The Centre of Evidence-Based Medicine (CEBM) (12). En la elaboración de la revisión se siguieron los criterios de calidad de la declaración Prisma (13). El análisis de la información recogida fue narrativo. Se agruparon los resultados en una tabla de síntesis.
 

Resultados 

En la búsqueda inicial se obtuvieron 5.768 registros, los cuales se redujeron a 29 tras la aplicación de los criterios de selección, la eliminación de duplicados, la lectura del título y del resumen. Tras la lectura crítica se eliminaron 12 artículos, obteniéndose un total de 17 (Figura 1). Entre los artículos seleccionados hay seis casos clínicos (1,3,4,7,8,14), dos casos y controles (15,16), dos estudios de prevalencia (17,18), cuatro estudios transversales descriptivos (19-22), dos revisiones (23,24) y un estudio de cohortes prospectivo (25). Del total de artículos, hay uno del año 2014, uno del 2017, cinco del
2018, uno del 2020, cuatro del 2021, uno del 2022, tres del 2023 y uno del 2024. Todos los estudios de cohortes, de casos y controles y la revisión sistemática obtuvieron una puntuación CASPe igual o superior a 8 puntos.
En la Tabla 1 se muestra la síntesis de resultados para los factores de riesgo o desencadenantes, las manifestaciones clínicas y las medidas preventivas del síndrome de la SQM. En nueve estudios se observó un perfil similar que corresponde con el de una mujer de entre 40 y 50 años (1,3,4,7,8,14,15,18,19). Los antecedentes de asma, atopia y demás procesos alérgicos fueron frecuentes. El estrés subjetivo, el bajo nivel socioeconómico y estatus social también fueron otros factores comúnmente asociados al desarrollo del síndrome de la SQM (1,14,17-21,23,25). Los factores desencadenantes más comunes fueron la exposición a productos de limpieza, productos perfumados (perfumes, desodorantes y ambientadores) y materiales presentes en edificios de nueva construcción o reformados (1,3,4,7,8,14,16-18,22-25). Respecto a las manifestaciones clínicas, las más habituales fueron las relacionadas con la disfunción respiratoria (disnea, crisis asmática y tos) y con alteraciones del sistema nervioso central (cefaleas y problemas sensitivos, neuromusculares y motores). También fueron comunes los problemas gastrointestinales (vómitos y diarrea) y cognitivos (falta de concentración y pérdida de memoria) (1,3,4,7,8,14,15,17-20,25).
 
 
 
 
 
Respecto a las medidas de prevención, la más frecuentemente empleada fue la de evitar la exposición a las sustancias químicas desencadenantes, especialmente a través de la adaptación o reubicación del lugar de trabajo y el acondicionamiento de la vivienda o habitación (1,3,4,7,8,14,17,18,22-24). La terapia psicológica, respiratoria y el tratamiento sintomático con broncodilatadores y corticosteroides también fueron empleados en algunos casos, aunque no contribuyeron a la mejora global de la enfermedad (1,4,14,18,23). También se mencionó la importancia de educar a la familia y a los miembros del círculo social de la persona afectada como forma de contribuir a la prevención de las manifestaciones clínicas de la SQM (23). Damiani et al. (24) proponen, mediante un consenso, la creación de un kit personalizado para cada paciente con SQM en el que se incluya material sanitario (mascarillas, gafas de oxígeno, etc.) libre de productos desencadenantes como el látex. También apuestan por una medida preventiva para el personal sanitario (técnicos de emergencias y personal del hospital), la cual consiste en evitar el uso de perfumes y desodorantes en las seis horas previas al comienzo de la actividad laboral.
 

Discusión 

El síndrome de sensibilidad química múltiple es un trastorno crónico y limitante caracterizado por la manifestación de múltiples síntomas tras la exposición a dosis bajas de sustancias químicas. Los factores desencadenantes y los signos y síntomas desarrollados pueden ser muy variados en función del caso. Sin embargo, la evidencia encontrada sugiere que los factores desencadenantes más habituales son los productos perfumados y de limpieza, y que las manifestaciones clínicas más frecuentes son las relacionadas con el sistema respiratorio y el sistema nervioso central. Cabe destacar el hecho de que la gran mayoría de personas afectadas por este síndrome son mujeres. Esto podría atribuirse a factores socioculturales y ocupacionales, dado que tradicionalmente las mujeres se han visto mayormente involucradas en la realización de actividades y puestos de trabajo que implican un mayor contacto con sustancias químicas (personal de limpieza, técnicos de laboratorio, etc.) (3,4,8). Otra explicación podría estar relacionada con la mayor concentración de grasa corporal del sexo femenino respecto al masculino. Sustancias como el benceno y el cloruro de metileno se absorben y se acumulan con mayor facilidad en el tejido graso, donde podrían liberarse y tener efectos tóxicos de forma prolongada, incluso después de haber cesado la exposición a dichas sustancias (26).
El asma y la alergia han sido algunas de las enfermedades más asociadas con este síndrome. Esto ha llevado a plantear hipótesis etiológicas que proponen que la SQM podría estar originada por una disregulación del sistema inmunológico.
Los resultados hallados en la presente revisión sugieren que el asma, la atopia y demás procesos alérgicos podrían estar estrechamente relacionados con este síndrome (1,14,17,18,21,23,25). Sin embargo, en un estudio de prevalencia de la SQM realizado en dos grupos de trabajadores universitarios (investigadores de laboratorio y administrativos) se encontró que ser alérgico o asmático no se relacionaba con una mayor prevalencia del síndrome, lo que contradice la hipótesis del mecanismo de sensibilización alergénica como etiología de la SQM (27).
Recientemente, también se ha considerado la SQM como una posible variante de la hipertensión intracraneal idiopática a raíz de un caso publicado en Jacobs Journal of Neurology and Neuroscience. Además, se hace referencia a la existencia de un componente genético para ambas afecciones, puesto que el hijo de la paciente del caso también ha sido diagnosticado de SQM y de hipertensión intracraneal idiopática (7). Esto coincide con los hallazgos de un estudio de casos y controles en el que se concluye que la predisposición genética a la SQM podría estar implicada en una alteración de la biotransformación de los agentes químicos (28). Aunque todavía no se conocen los mecanismos fisiopatológicos involucrados en la hipertensión intracraneal en relación con la SQM, este caso sin duda abre nuevas perspectivas para el estudio de ambas patologías.
La ansiedad, la irritabilidad, la pérdida de memoria y la depresión son otras de las manifestaciones clínicas a destacar que se relacionan con el síndrome de la SQM, según la evidencia encontrada. Esto concuerda con las conclusiones de un estudio transversal publicado en Journal of Psychosomatic Research en 2017, en el que se encontró una asociación entre el síndrome de la SQM y el trastorno depresivo mayor y de ansiedad generalizada (29). Además, en el caso de los hombres también se halló una relación inversa entre el bienestar mental y la SQM. Debido a la falta de explicaciones biológicas uniformes, se ha llegado a sugerir un posible origen psicológico de la SQM, aunque todavía no está claro si las alteraciones psicológicas y psiquiátricas son parte de la causa o bien una consecuencia de las manifestaciones físicas del síndrome (2,4). En una revisión reciente publicada en Translational Psychiatry se evidencia la participación de la disregulación inmunológica en el desarrollo de la depresión mayor y del trastorno bipolar, algo que podría constituir un punto de encuentro para las hipótesis inmunológicas y psiquiátricas acerca de la etiología de la SQM (30).
En tres de los estudios seleccionados se ha observado que habitar en edificios de nueva construcción o recientemente reformados está relacionado con la manifestación de los síntomas de la SQM (18,22,25). En un estudio publicado en la revista Building and Environment se encontró un mayor riesgo de desarrollo de SQM en habitantes de apartamentos con mayores concentraciones de formaldehídos y compuestos orgánicos volátiles (COV). Además, también se concluyó que la mayor prevalencia de SQM en dichos apartamentos no solo se debía a factores relacionados con condiciones alérgicas de sus habitantes, sino también con características propias del edificio (31). A modo de hipótesis, esto podría llevar a considerar a la SQM como una variante o subtipo de síndrome del edificio enfermo (SEE).
Dada la gran variedad de manifestaciones clínicas, factores desencadenantes y comorbilidad con otras enfermedades, el síndrome de la SQM es una entidad patológica de difícil diagnóstico. Este se basa en la valoración clínica de los signos y síntomas y en la aplicación del cuestionario QEESI; una herramienta validada que ha mostrado una sensibilidad del 92% y una especificidad del 95% para el diagnóstico de la SQM (3,4,32). La amplia diversidad de aparatos y sistemas que pueden verse afectados en la SQM también requiere un tratamiento multidisciplinar dirigido a eliminar o disminuir la intensidad de los signos y síntomas tras la exposición a un agente químico. La síntesis de resultados obtenidos muestra que la evitación de la exposición a los agentes desencadenantes es la medida preventiva más habitualmente recomendada para las personas que sufren SQM. La recomendación en Atención Primaria de los kits de emergencia individuales y la reserva de espacios libres de químicos en los hospitales donde poder atender a pacientes con SQM podrían ser medidas preventivas realmente beneficiosas. También cabe destacar la terapia psicológica especializada, la promoción de la salud y la educación de los miembros de la esfera social y familiar del afectado como recursos valiosos para el abordaje de la SQM (4,17). Esto podría jugar un papel fundamental para el manejo de la enfermedad, dado que la evidencia sugiere que, además de las consecuencias físicas, el síndrome de la SQM puede llegar a tener repercusiones importantes sobre la dimensión psicológica y social de las personas que la padecen, las cuales a menudo reportan sufrimiento psicológico y existencial, así como problemas sociales, laborales y económicos (4,5,33,34).
Respecto a las limitaciones del estudio, cabe señalar el bajo nivel de evidencia de los casos clínicos incluidos en la revisión, lo cual limita considerablemente su nivel de aportación a la calidad de esta. En virtud de apostar por un enfoque biopsicosocial, sería interesante revisar o llevar a cabo trabajos de investigación cualitativa con el fin de identificar nuevas variables relacionadas con las dimensiones subjetivas de las personas que padecen el síndrome de la SQM. Esto podría facilitar el diseño de nuevas terapias psicosociales encaminadas a tratar alteraciones como la ansiedad, el dolor, la depresión y el aislamiento social que, con frecuencia, acompañan a la persona que padece este síndrome.
 

Conclusión 

El síndrome de la sensibilidad química múltiple es un trastorno crónico, multisistémico e incapacitante caracterizado por la manifestación de una amplia variedad de signos y síntomas tras la exposición a dosis bajas de agentes químicos que, en casos graves, puede llegar a requerir el aislamiento completo del paciente. Afecta principalmente a mujeres de entre 40 y
50 años con antecedentes de asma y alergias. Los agentes químicos desencadenantes más frecuentes son los productos de limpieza y los perfumados, y las manifestaciones clínicas más habituales son las respiratorias (disnea, tos, crisis asmática, etc.) y las del sistema nervioso central (cefaleas, alteraciones neuromotoras, etc.). Las principales medidas de prevención para la SQM son el acondicionamiento de la vivienda y de espacios hospitalarios, la evitación de los agentes desencadenantes y la creación de kits de emergencia de uso personal. El tratamiento sintomático también puede ser efectivo en algunos casos. La terapia psicológica, la promoción de la salud y la educación de los miembros del entorno social y familiar del afectado podrían ser recursos valiosos para el abordaje de la SQM, dado que se trata de una patología que puede llegar a repercutir gravemente en la dimensión psicológica, social y laboral de la persona que la sufre.
 

Conflicto de intereses 

Ninguno.
 

Financiación 

Ninguna.
 

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Revisiones - 2 - Intervenciones para favorecer la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH en padres: revisión integrativa

 
Cómo citar este artículo:
Gómez-Ramírez K, Orozco-Gómez C, Patiño-López ME. Intervenciones para favorecer la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH en padres: revisión integrativa. RIdEC 2024; 17(2):57-65.
 
Fecha de recepción: 22 de abril de 2024.
Fecha de aceptación: 13 de noviembre de 2024.
 

Autores

1 Karla Gómez Ramírez
2 Claudia Orozco Gómez
3 María Esther Patiño López
 
  1. Licenciada en Enfermería y Obstetricia. Universidad de Guana-juato. División de Ciencias de la Salud e Ingenierías. México.
  2. Doctora en Ciencias de Enfermería. Universidad Autónoma de Chihuahua. Facultad de Enfermería y Nutriología. México.
  3. Maestra en Ciencias de Enfermería. Universidad de Guanajuato. División de Ciencias de la Salud e Ingenierías. México.
 
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Resumen 

Objetivo: revisar la información disponible sobre las intervenciones que favorezcan la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH en padres.
Método: revisión integrativa basada en Dollande et al., la metodología PRISMA. La búsqueda de artículos se realizó en los últimos 10 años, en idioma español e inglés a través de las bases de datos PudMed, EBSCO Host, BVS, Scielo y Science Direct, lista de referencias de artículos y literatura gris. Se usaron las palabras claves siguientes: intervention, vaccine papilomavirus, acceptability y parents, integrando el operador booleano AND.
Resultados: tres intervenciones aumentaron la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH en padres; sin embargo, se encontró que también fueron efectivas en componentes secundarios como el conocimiento, la actitud hacia la vacuna, la intención para vacunar, las creencias positivas sobre la vacuna contra el VPH.
Conclusiones: esta revisión genera una perspectiva nueva sobre la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH en padres que permite evidenciar elementos que son relevantes para llevar a cabo una intervención como es el uso de las teorías y herramientas tecnológicas para aumentar la aceptabilidad de la vacunación contra el VPH.
Palabras clave: intervención; vacuna contra el VPH; aceptabilidad; padres.
 

Abstract 

Interventions to promote HPV vaccine acceptability in parents: an integrative review 
 
Objective: to review available information on interventions to promote HPV vaccine acceptability to parents.
Methods: integrative review based on Dollande et al., PRISMA methodology. The search for articles was conducted in the last 10 years, in Spanish and English through the databases PudMed, EBSCO Host, BVS, Scielo and Science Direct, reference list of articles and grey literature. The keywords intervention, vaccine papillomavirus, acceptability and parents are used, integrating the Boolean operator AND.
Results: three were only two interventions that increased the acceptability of the HPV vaccine in parents; however, they were also found to be effective on secondary components such as knowledge, attitude towards the vaccine, intention to vaccinate, positive beliefs about HPV vaccine.
Conclusions: this review generates a new perspective on the acceptability of the HPV vaccine in parents that allows us to evidence elements that are relevant to carry out an intervention such as the use of theories and technological tools to increase the acceptability of HPV vaccination.
Key words: intervention; HPV vaccine; acceptability; parents.
 

Introducción 

El virus del papiloma humano (VPH) es una infección de transmisión sexual de alta prevalencia. En el año 2022 se estima que 7.941,66 millones de personas se habían infectado con el virus (1). La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo cataloga como un problema de salud pública (2) que tiene repercusiones debido a que se considera como principal percusor del cáncer cervicouterino, cáncer de pene, ano, vagina y orofaríngeo, así como de verrugas genitales. En este sentido, la OMS reporta una incidencia mundial de cáncer cervical de aproximadamente 570.000 casos invasores diagnosticados por año (3). Dentro de las posibles soluciones que los gobiernos han encontrado para prevenir la infección del VPH y sus complicaciones ha sido el uso del condón como forma de protección del área que cubre, así como la vacunación contra los serotipos oncogénicos y no oncogénicos más comunes y de mayor impacto mundial (4).
Existen diversas vacunas para la prevención del VPH, en la actualidad la vacuna Gardasil® (9) es la que protege contra nueve serotipos de VPH, dentro de los oncogénicos cubre contra los tipos 16 y 18 que son serotipos con mayor potencial para desarrollar cáncer y con mayor prevalencia, también cubre con otros tipos oncogénicos que se encuentran con menor frecuencia como el VPH 31, 33, 45, 52 y 585. Además, protege contra VPH no oncogénicos del tipo 6 y 11 que generan verrugas genitales (6).
Las recomendaciones para recibir la vacuna contra el VPH dependen de cada país, pero la OMS y el fabricante recomiendan aplicarla en escolares de entre 9 a 15 años que no han iniciado vida sexual por lo menos en una sola ocasión (7), contemplando a esta población como el foco de las de campañas de vacunación a lo largo del planeta. Para el año 2023, en el continente americano, la cobertura de la primera dosis de la vacuna contra el VPH en mujeres de 15 años fue del 76% (8).
Sin embargo, debido a sucesos históricos como la pandemia por COVID-19 y la globalización (9) ha disminuido la cobertura en el mundo de esta vacuna, ya sea por desabasto o prioridad ante otras enfermedades (10). Otro factor que ha contribuido ha sido la corriente antivacunas, la cual genera dudas sobre la efectivad y seguridad de esta vacuna. Además de la percepción del riesgo y el conocimiento sobre el VPH y sus complicaciones (11), la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH de los padres (12) contribuye a que estos lleven a cabo la vacunación de sus hijas. La aceptabilidad se define como la aprobación y el acuerdo que los padres tienen para la vacunación contra el VPH, cabe resaltar que en revisiones sistemáticas previas, el término de aceptación o aceptabilidad se usa como un sinónimo de intención o voluntad; sin embargo, para esta revisión no se considera como sinónimos (13).
Es importante mejorar la aceptabilidad en los padres debido a que, en la aplicación de la vacuna en los escolares, al ser menores de edad, el consentimiento y decisión de si la aplicación se lleva a cabo recae en ellos. Frecuentemente los padres reciben información a través de diversos medios de información que pueden llegar a confundirles en la toma de decisiones, por lo que es importante que el personal de enfermería oferte la vacunación contra el VPH y eduque sobre esta con información que permita disminuir las creencias erróneas de la vacuna (14).
Existen revisiones sistemáticas previas que sintetizan la evidencia disponible sobre estrategias de aceptabilidad de la vacuna contra el VPH, pero no son específicas en los padres (15), por lo que se consideró de manera sustancial la creación de una revisión integrativa que permita revisar la información disponible sobre las intervenciones que favorezcan la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH en padres, lo cual permitirá ampliar el conocimiento sobre las estrategias viables para que sean utilizadas en práctica de enfermería. La pregunta que se planteó para la búsqueda de la revisión fue ¿cuáles son las intervenciones efectivas para favorecer la aceptabilidad de la vacuna contra VPH en padres de adolescentes? 
Método 
Se realizó una revisión integrativa bajo los pasos de Dollande et al. (16) y se utilizó el método PRISMA (17). La búsqueda de los artículos se realizó en las bases de datos PudMed, EBSCO Host, BVS, Scielo y Science Direct, además se consultaron listas de referencias de artículos y literatura gris. Se emplearon las palabras claves: intervention, vaccine papilomavirus, acceptability y parents, integrando el operador booleano AND, las palabras clave se identificaron en los Descriptores de la Salud con excepción de la palabra aceptabilidad, la cual se identificó en palabras claves de artículos que han utilizado esta variable. Se incluyeron artículos que tuvieran como diseños experimentales, ensayo clínico aleatorizado, estudios cuasiexperimentales o preexperimental y revisiones que abordarán intervenciones de interés. Además, que estuvieran escritos en el idioma español e inglés y publicados dentro del periodo 2014-2024. Se excluyeron artículos que fueran protocolos de intervención, artículos que no estuvieran a texto completo, aquellos que estuvieran dirigidas a personal de salud, así como a otras poblaciones.
Para la selección de los artículos, se exportaron a la herramienta web Rayyan, la que cual permitió que se efectuara el escrutinio por dos revisores de manera independiente, cabe mencionar que no existieron discrepancias en la selección de los artículos. Para la selección de los artículos se efectuó primero por la lectura de los títulos, dejando de lado los que no incluyeran las palabras clave, posteriormente se pasó a lectura de los resúmenes y para finalizar se hizo lectura crítica del texto completo para lo cual se evaluó a través de ficheros FLC.
Dentro de los criterios incluidos en la ficha FLC 3.0 para ensayos clínicos, son referencias, descripción del estudio, pregunta de investigación, método, resultados, conclusiones, conflicto de interés, validez externa y calidad del estudio. Cada uno de estos elementos es evaluado con una de tres respuestas “Sí”, “Parcialmente” y “No”, que refleja el grado de cumplimiento de cada criterio. Con base en las respuestas se clasifica la calidad general del estudio en tres niveles: alta, media o baja. Un estudio se considera de alta calidad cuando la mayoría de los criterios han sido evaluados como “Sí”, de calidad media si la mayoría de los criterios reciben la valoración de “Parcialmente”, y de baja calidad si la mayoría de las respuestas son “No”.
Para mayor precisión, el sistema permite hasta nueve combinaciones posibles de respuestas, lo que facilita al evaluador una valoración completa y estructurada sobre la calidad del estudio (18). Este proceso asegura que los ensayos clínicos cumplan con estándares metodológicos adecuados, aportando mayor confiabilidad y validez a sus resultados y conclusiones.
Se elaboró una tabla de extracción que permitió resumir la evidencia disponible así como los datos claves de los estudios, la cual incluyó autor/es, año de publicación, país, objetivo del estudio, teoría, método y diseño, característica de la intervención, contenido temático y principales resultados. El análisis y la presentación de resultados se presentaron en tablas con síntesis descriptiva de los datos encontrados.
 

Resultados 

En la Figura 1, se puede observar que a través de la búsqueda en las bases de datos se obtuvieron 1.029 artículos, de los cuales se eliminaron 224 duplicados, obteniendo así 803 artículos para su selección por medio de la lectura de los títulos, de los cuales 200 no se recuperaron en la búsqueda; por tanto, fueron 503 buscados para su recuperación. En la siguiente fase de lectura de los resúmenes, se evaluaron 303 artículos de lectura completa, de los cuales 200 no cumplían con la población que se buscaba, 40 contaban con resultados incompletos, 20 no están en texto completo, 25 tenían una discordancia lingüística entre el título y los resultados, por lo que se excluyeron, y 15 fueron estudios pilotos que solo evaluaban la viabilidad y factibilidad de la intervención, pero no brindaban resultados que pudieran seleccionarse. Adicionalmente se agregaron 10 artículos de fuentes secundarias o búsqueda por referencias, de las cuales solo cuatro fueron evaluadas para su elegibilidad, siendo tres descartados por sus resultados que no mencionaban la variable de aceptabilidad y solo hacían alusión a esta en el título o en sus resúmenes. Los estudios incluidos que cumplieron con los criterios antes mencionados fueron cuatro.
Como posible limitante es que dentro de la búsqueda no se incluyeron artículos de no open acces debido a que no se encontró dentro del cribado; sin embargo, no se realizó una búsqueda en revistas de pago para la búsqueda de estudios de estas variables, siendo esta una limitante.
Los estudios que se encontraron fueron de los años 2019 al 2023, en países como Indonesia (19), Estados Unidos de América (20), Holanda (21) y Nigeria (22), fueron escritos en idioma inglés. La totalidad de los artículos buscaban evaluar la intervención para mejorar la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH; sin embargo, también se contempló incrementar la conciencia, el conocimiento (19-22) y las percepciones sobre la infección del VPH, vacuna contra el VPH y el cáncer uterino (21).
Tres de las intervenciones fueron guiadas por teoría, entre estas se encontraron el Modelo de Creencias en Salud (19,20) y la Teoría de la Conducta Planeada (20), dentro de la calidad de los artículos se pueden destacar que tres se ellos tenían una calidad media debido a que se catalogaron entre preexperimental y cuasiexperimental (19,20,22); sin embargo, dos de los artículos obtuvieron una ponderación de alta calidad debido a su naturaleza de ensayo clínico aleatorizado, así como sus características.
Se observó que en los cuatro artículos las madres se ven involucradas de manera activa y en mayor proporción, aunado a esto, en dos de los artículos destaca que los padres participaron de manera conjunta, aunque en menor proporción (19,20).
En las características propias de cada intervención se encontró que tres de las intervenciones (20,21) se realizaron utilizando medios tecnológicos como tabletas y computadoras donde por medio de programas de software tenían el acercamiento con las herramientas para mejorar la aceptabilidad; por otro lado, las otras dos intervenciones educativas contaron con un capacitador que guío todo el seguimiento durante una sesión de una manera presencial, utilizando como recurso las presentaciones en PowerPoint, la discusión, folletos y carteles como estrategias de la intervención (19,23).
 
 
Las intervenciones fueron efectivas para incrementar la aceptabilidad, fueron de tipo educativa (19,23) y con uso de tabletas y un software (20). También fueron efectivas para incrementar en conocimiento y percepciones de la vacunación contra el VPH en todas las intervenciones, disminuir barreras para poder los padres otorgar su consentimiento para esta vacuna contra el VPH (19-21), como se puede observar en la Tabla 1.
 
 

Discusión 

Esta revisión integrativa tenía como finalidad sintetizar la evidencia disponible sobre las intervenciones que contribuyan a la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH en padres, solo dos fueron efectivas para incrementar la aceptabilidad de la vacuna en padres. En comparativa con la revisión sistemática de Benavides et al. (15), en la cual se encuentran intervenciones dedicadas tanto a los padres de familia, adolescentes, así como en personal sanitario; sin embargo, dentro de sus resultados no menciona la variable de aceptabilidad, pero se menciona de manera importante el aumento de las tasas de vacunación posterior a la finalización del programa, demostrando la eficacia de las intervenciones. Los principales miedos que los padres tenían para la aceptación de la vacuna contra VPH fueron los posibles efectos secundarios de la vacuna o el dolor que causaría su aplicación, se denota que en esta revisión solo un artículo incluía a los padres como población (23).
Haciendo comparativas con otra revisión, se encuentran detalles significativos que permitieron generar una lectura de referencias secundarias, en esta destacan que solo el 12% (2/17 artículos) informó un impacto limitado o nulo de la intervención en la aceptación de la vacuna. Se confirma que existen pocos artículos que mencionen información sobre la aceptación de la vacuna y que tengan resultados significativos. Como complemento se optó por realizar lectura de las referencias, así se pudo integrar un artículo más para complementar esta revisión (24).
En el análisis de los artículos, se encontró que las intervenciones fueron efectivas en generar cambios en componentes que promueven la aceptabilidad de los padres para llevar a cabo la vacunación de sus hijos, entre estas se encontraron el conocimiento, las actitudes y las creencias (19,21,22), por lo que es importante que el personal de enfermería intervenga en ellos. Esto se afirma en un estudio que buscaba explorar las actitudes, el conocimiento y la toma de decisiones de los padres sobre la vacunación contra el VPH en adolescentes (25) que fue realizado en el año 2021, confirmando que se va encaminando la creación de intervenciones efectivas en mejorar la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH.
Al realizar esta revisión, se detectó dificultad en la selección de artículos debido a la conceptualización de la aceptabilidad (13), se encontró discordancia entre la variable resultado de aceptabilidad y la variable que mencionaban en el apartado de resultados, entre estos hacían referencia a la voluntad, la intención y la cobertura. Aun así, se encontró una revisión sistemática que abarcaba la aceptabilidad; sin embargo, se encontraba fuera del periodo establecido, por lo que al hacer la recuperación de los estudios se encontraron referencias mayores a 10 años, por lo que se puede considerar como criterio de exclusión (26).
En esta revisión las intervenciones estuvieron dirigida a padres, predominando las madres, las cuales son las más involucradas en el cuidado de los hijos por imposición social y cultural, el cuidado se ha ligado a la maternidad. La maternidad no es un “hecho natural”, sino una construcción cultural compleja y poderosa que es, a la vez, fuente y efecto del género (27). Por ende, debe de involucrarse tanto a los padres como madres en las intervenciones dependiendo de la construcción familiar de cada escolar adaptándose a su contexto social. No obstante, revisiones previas incluyen solo a adolescentes para favorecer el conocimiento sobre el VPH y la vacuna (28), es importante que tanto los adolescentes como los padres tengan el conocimiento, debido a que este grupo etario para poder adquirir la vacuna contra el VPH debe de contar con el consentimiento de los padres o tutores, la recomendación para la aplicación de la vacuna involucra que el menor aún no tenga contacto sexual, por lo tanto al ser mayor de edad pudiera obtenerla, pero podría no ser efectiva como lo disponen sus fichas técnicas.
Dentro de las limitaciones de esta revisión se pueden encontrar aspectos conceptuales donde se abordó de manera muy específica el concepto de aceptabilidad, siendo rigurosa la selección de los artículos dispuestos. Contemplando esto, se sugiere crear un concepto general que no involucre la intención como un sinónimo de aceptación, por lo que considerando que se puede operacionalizar la aceptación como una variable se ha de contemplar la sinonimia como un recurso lingüístico, como potencial de intercambiar dos palabras en un contexto determinado sin que se pierda el significado original. Todo ello ha presentado una serie de problemas teóricos y técnicos en la lingüística (29), por lo que se invita a realizar estudios que generalicen un término que pueda ser utilizado en referencia la vacuna contra el VPH, como lo hacen en la vacuna contra COVID-19 (30) y que anexe a los Descriptores de Ciencias de la Salud. Además, la calidad de los estudios no es alta en la mayoría de los artículos y en las intervenciones mostraron resultados variables.
También es primordial generar un descriptor en Ciencias de la Salud que permita concretar la aceptabilidad como un todo, sin tener que pasar por procesos lingüísticos que puedan limitar la búsqueda de información, lo cual puede limitar los sesgos en la creación de nuevo conocimiento para el personal de enfermería.
 

Conclusiones 

Se encontraron intervenciones que son efectivas para incrementar la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH a través de sesiones educativas y mensajes personalizados en línea. Asimismo, fueron efectivas en factores que predicen la aceptabilidad como el conocimiento, las actitudes y creencias por lo que es necesario fortalecerlos en los padres de escolares o adolescentes para que les permita tomar decisión respecto a la vacunación contra el VPH en sus hijos. Es importante incentivar a los profesionales de la salud a realizar intervenciones que ayuden a generar la aceptabilidad de la vacuna contra el VPH, lo cual podría ayudar a combatir esta problemática a nivel internacional, que aqueja a todos los países con sus repercusiones que pueden llegar a ser mortales si no hay una prevención.
 

Conflicto de intereses 

Ninguno.
 

Financiación 

Ninguna.
 

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